Un bistró parisino con una decoración tradicional, una nueva pizarra y una buena relación calidad-precio.
Situado entre la calle de Babilonia y el bulevar Raspail, este bistró parisino con decoración tradicional es el antro de Jean-Baptiste Gay, que propone una pizarra renovada a diario y compuesta por 7 entrantes, 7 platos y 7 postres. La cocina de este pastelero original, que ha hecho sus clases junto a chefs estrellas, es bistronómica, es decir tradicional y rústico, pero revisitada y sobre todo modernizada. Se piensa, por ejemplo, en la entrada a los piquillos de cabra fresca y albahaca y, en el plato, en el palo de buey y sus zanahorias confitadas con naranja y cupo. Al final de las comidas, el mullido chocolate, helado vainilla, o la sartén de frambuesa fría pistache no arruinarán tu placer, muy al contrario. Muy buena relación calidad-precio para el barrio.
Les prix sont indécents pourla qualité de la nourriture ! À fuir !
The downside is that it takes a long time for food to be served. The place is pretty small so the seats are limited. The price is also pretty high (about 40 euros per person). However, at least the service of the staff are good, and they apologized for being slow.
Overall, still would recommend the place if you aren’t in a rush and are down to try some home cook French food.
A éviter.