Antiguo hotel privado de París que ofrece auténticas carnes estofadas y diversos postres.
Jean-Claude Brialy fue el maestro de los lugares durante 40 años. Desde la desaparición del actor, el Orangerie reventada le hace homenaje, las evocaciones del actor nunca son muy lejanas. En este antiguo hotel particular del siglo XVIII en el corazón de la isla Saint-Louis -un auténtico decorado de postal-, descubre aquí sabores auténticos como ensalada de San Martín con nueces y coings, la suprema de lata de Vendée a la sidra, el rodaballo en el horno y salsa de vino blanco, un cordero de cordero blanco de siete horas con puré a la antigua, y postre, pastel de tacón con manzanas, crema fresca. Del clásico clásico para un lugar de leyenda que combina elegancia y gastronomía.
Accueil très chaleureux, cuisine à la fois raffinée et généreuse.
Je recommande à 100%