108 CAFÉ
Café-restaurante en París que sirve cocina familiar, carnes, hamburguesas y un brunch todo incluido los fines de semana.
Es un espacio complicado de caracterizar de manera sencilla. El 108 Café es evidentemente un café, pero también es una librería (la Librairie des Orgues), una sala de conciertos y un restaurante que funciona en una carta corta, sobre pizarra. La cocina es familiar, sin pretensiones pero de buena calidad, para consumir in situ o para llevar. Nos gusta la sopa de tomate, bulgur, garbanzos, cilantro fresco, o el huevo cocota en la horma de Ambert en entrada. En el plato, se agradece el ratón de cordero confitado y de su sémola a las pequeñas verduras o incluso de la blanqueada de ternera con naranja, pero las hamburguesas son también un regal con una preferencia por la hamburguesa de Ambert (sí, la denominación de origen controlada obliga). En cuanto a la crema quemada a flor de orar, es nuestro bonito pecado. El 108 propone una buena cocina, la que renació y no decepciona. El brunch a voluntad los sábados y domingos es exactamente el mismo espíritu. Por último, apreciamos la atmósfera, sencilla y desenfadada, sin tomar la cabeza, un poco bobo pero no demasiado.