CITÉ DURMAR
Esta ciudad, patrimonio de París, alberga la fragua más antigua de la capital, comerciantes de artículos de segunda mano y diseñadores gráficos.
La Cité Durmar, una imagen casi congelada de una época pasada. Sus adoquines, sus plantas trepadoras a lo largo de los talleres (no todos siguen activos) evocan un París olvidado, una época en la que la ciudad parecía un pueblo. Aquí se encuentra la fragua más antigua de la capital, así como comerciantes de artículos de segunda mano, diseñadores gráficos y creadores. Sin embargo, la calle está en peligro, ya que los promotores tienen en el punto de mira estos metros cuadrados que pueden transformarse fácilmente en lofts o boutiques de moda. Esperemos que este patrimonio parisino se mantenga libre de los grandes nombres que ya pululan por toda la capital