Restaurante en París que ofrece un menú muy de moda con sabores originales y una variedad de tapas.
Esta dirección de decoración 100% naturaleza forma parte de las citas discretas del barrio Voltaire. Su entorno encantador -compuesto de baldosas antiguas, paredes rascadas y plantas verdes- es muy atractivo y cambia de las habituales matices de grises y malvas que ahora visten los restaurantes de París. La apertura es reciente, se espera un servicio candente y una carta muy motadora… pero no es así. Las propuestas son sorprendentes y originales y el servicio es irreprochable. En particular, podrás aplaudir las dos manos del magnífico helado del Gwell, un yogur bretón con leche fresca no pasteurizado de vaca patí, un postre que nuestros amigos bretones habrían guardado para ellos. En la cena se sirven tapas variadas y variadas y vinos muy naturales.
한번간집 두번은 잘 안가는데 내 파리 찐 피자맛집
와인종류도 많아서 피자에 오렌지와인 한잔 딱하면 최고최고
????