Una dirección en Issy-les-Moulineaux con un menú de mercado sencillo, sabroso y bien preparado.
Cada día, tras la fachada blanca y negra, el chef del Au 31 propone al almuerzo una pizarra elaborada a voluntad del mercado con sencillez, pero siempre cuidada y sabrosa. Para conocer las celebraciones, mira la pizarra, está llena de delicias. Por la noche, la carta se complica con platos más elaborados: abogado con cítricos, crema de champiñones, ravioles con foie gras, aves de especias, nada innovador pero la cocina realiza un sin falta y los productos están frescos. En efecto, todo aquí está preparado para el pedido. Desafortunadamente, la calidad tiene su precio, un precio que tiene todo su sentido con la primera bocada. Un lugar que te gustaría conservar para estar seguro de que siempre tienes su cobertura, pero te aconsejaría reservar antes de ir allí.
Cuisine bonne mais comme disait mon grand père qui gérait plusieurs restaurants : « Un bon service peut rattraper un mauvais repas mais un bon repas ne pourra jamais rattraper un mauvais service »…
A bon entendeur !