ARARAT
Ararat, ya la denominación es sugestiva. Una pequeña tienda no parece nada a primera vista, pero en cuanto se penetra, los olores de Oriente nos arrasan… hay un pescador feliz que respeta la tradición de los mercados de las especias que nos cargan y nos dan ganas de viajar. Aquí, todos los países de Europa Central y Oriental y muchos de Oriente Próximo conviven pacíficamente según los productos solicitados. Algo de la infancia da la mirada y los dulces exóticos están al alcance de la mano. Vinos de Moldova o de Georgie, corniones a la rusa, zakouska picante o no, rábano, pan negro, salchicha de buey, espadín, pelvis de ternera o pollo están entre tantas variedades culinarias dispuestas al placer de la degustación. Una nota de los países del Este que viene a enriquecer nuestro universo culinario.