PUNJAB
Pasando la puerta de este restaurante, los perfumes de Pakistán y la India te invaden con voluptuosidad, mientras que la madera esculpida, las pinturas anaranjadas y los tejidos orientales te llevan muy lejos de Chartres. La alegría se invita hasta tus platos, con sabores suaves, sabiamente mezclados, e infinitamente refinados. Las especialidades paquistaníes e indias, todas más coloridas y perfumadas unas que las demás, ponen nuestras papilas en éyo… a imagen del Kulfi, un helado indio hecho casero y según la tradición: es una pura maravilla, que encantará a más de uno. En definitiva, por un precio relativamente modesto, el Punjab te propone un viaje ineludible hacia Oriente. Y para acompañarte a lo largo de este viaje culinario, no podrás soñar con un servicio más agradable. Así que déjenle llevar, y asegúrense de…