A medida que se acercan las vacaciones, salir de casa durante varios días o semanas puede resultar estresante para muchos hogares. Es cierto que nadie está a salvo de un intruso, una fuga de agua o un incendio. En lugar de marcharse con una sensación de hundimiento y pasar unas vacaciones no del todo relajadas, hay algunas soluciones a tener en cuenta para asegurar la casa y prevenir cualquier problema. Una vez que haya tenido en cuenta todas estas cosas, y las haya aplicado, no hay razón para salir en estado de ansiedad, y sus vacaciones serán de relajación y placer.
Guardar las cosas que puedan atraer a los ladrones en el jardín
El primer paso es guardar en el garaje cualquier cosa que pueda atraer a los ladrones al patio y al jardín. No hablamos de las pocas macetas y los muebles de plástico del jardín, sino del cortacésped y otras herramientas de mantenimiento, el segundo coche, una moto y las bicicletas. Lo mejor es guardar todo en el garaje, que se cierra con una puerta adecuada. Una puerta de garaje fabricada en Francia y de aluminio, que tiene fama de ser sólida, es la mejor opción. Enrollable, seccional o abatible, lo ideal es que no contenga ninguna ventana que permita ver lo que hay dentro.
Cierra las ventanas y las persianas, sí, pero da la ilusión de que la vida está en plena marcha
Por supuesto, las persianas deben estar cerradas por la noche, es una medida de seguridad básica. Pero cuando están cerradas todo el día durante varios días, no hay mejor manera de hacer entender a los ladrones que la casa está desprovista de vida humana. Una forma de simular una presencia cuando no estás es pedir a un vecino o amigo que abra las persianas y las vuelva a cerrar por la noche. Es raro que todo el mundo se vaya al mismo tiempo y esto dará la ilusión de que la casa sigue ocupada. Tal vez sea también el momento de pensar en el cuidado de la casa Un sobrino, una sobrina o un primo que viva en un piso podría estar encantado de venir a disfrutar de la casa y el jardín mientras tú estás fuera. También pueden recoger el correo, regar las plantas, evitar que el buzón se desborde e incluso cuidar de los animales. ¡Dos pájaros de un tiro!
Instalar una alarma en casa
Se trata de una opción a la que se acogen cada vez más hogares y que ha demostrado su eficacia. La instalación de una alarma es muy útil. Suena cuando se abre una puerta o una ventana o cuando se rompe una ventana, pero también puede detectar el movimiento. También hay alarmas con vigilancia remota que, en caso de intrusión, envían una alerta a un equipo que trabaja en una plataforma. La persona que está detrás de la pantalla puede ponerse en contacto con la policía para que intervenga en su casa lo antes posible. Este tipo de alarma también puede enviar alertas en caso de daños por agua o incendio. Y sabemos lo dramáticas que pueden ser las consecuencias de estos incidentes.
Notificar a la gendarmería su salida de vacaciones
Puede que no lo piense, pero la Operación Tranquilidad Vacacional es un sistema que le permite pedir a la gendarmería o a la policía que vigile su casa durante las vacaciones. El principio es sencillo: rellenas un formulario que puedes encontrar fácilmente en Internet y lo entregas en la gendarmería o comisaría más cercana. A continuación, las patrullas de vigilancia programan visitas periódicas a la casa para asegurarse de que todo va bien y para disuadir ocasionalmente a los malintencionados.
