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El reloj avanza y es hora de empezar a pensar en las reservas para las próximas vacaciones de verano Para muchos de nosotros, la temporada estival es sinónimo de pasar tiempo junto al mar. ¿Y si optamos por otro tipo de vacaciones, embarcándonos en un barco para pasar una semana de ensueño con la familia o los amigos? Barcos a motor, catamaranes, veleros, para navegar solo o acompañado de un patrón, el mar es un hermoso patio de recreo para los amantes del sol y los exploradores deseosos de descubrir cosas nuevas. He aquí 5 buenas razones para reservar un barco este verano y disfrutar de un crucero que promete ser inolvidable

1- Alquiler de barcos: alojamiento y transporte incluidos en el precio

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Si se mira más de cerca, el precio de alquilar un barco a motor, un velero o incluso un catamarán es similar, y a veces incluso más barato que unas vacaciones que incluyan hotel, alquiler de coche y actividades in situ. En unas vacaciones con amigos, alquilar un barco durante una semana puede llevar de 4 a 12 personas según el modelo, y el precio por persona puede ser una verdadera ganga para esta experiencia inolvidable.

El alquiler de embarcaciones es cómodo porque sólo se paga una vez por un servicio que incluye alojamiento y transporte. Tomemos el ejemplo de unas vacaciones en las Cícladas. Aunque uno suele querer visitar varias islas, tiene que reservar no sólo las travesías en ferry, sino también las noches en distintos hoteles. Alquilar un barco en Grecia le permite meter las maletas en un velero o catamarán que le servirá de alojamiento. Los barcos disponen de varios camarotes para pernoctar, así como de una cocina para preparar las comidas. Olvídese de contratar un ferry, ¡el barco le permite desplazarse de isla en isla y aprovechar los mejores fondeaderos!

2- Una conexión permanente con la naturaleza

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En verano, las costas están abarrotadas, tanto si decides ir a destinos como el sur de Francia, Grecia o Croacia. Las aglomeraciones son densas y la sensación de descanso no siempre está presente, aunque esperamos con impaciencia este periodo para relajarnos y recargar las pilas. Con el alquiler de un barco, podrá disfrutar de un lugar más tranquilo para pasar sus vacaciones: el mar abierto. Lejos de las multitudes, es más fácil ir a lugares donde reina la calma y donde la única consigna es la relajación, tomando el sol al frente de un catamarán, por ejemplo. Adiós a las playas abarrotadas, hola a los fondeaderos y calas aisladas lejos de la vista para bañarse, remar o hacer snorkel y observar animales marinos (delfines, tortugas, peces, rayas, etc.). ¡La conexión con la naturaleza es total! Y por la noche, alquilar un velero le permitirá contemplar el magnífico espectáculo de la puesta de sol a bordo de una embarcación espaciosa y confortable.

3- No se requiere experiencia en navegación, posibilidad de ir acompañado de un patrón

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Algunos se preguntarán ¿cómo navegar en un barco sin experiencia previa? Debe saber que el alquiler de barcos no es sólo para marineros experimentados o navegantes profesionales. Ahora es posible alquilar un barco con patrón para embarcarse tranquilamente en un crucero. Juntos definen el itinerario y el patrón se encarga de la navegación. Usted sólo tiene que dejarse llevar por las olas ¿Piensa alquilar un barco en Córcega? El guía, para quien las técnicas de navegación no tienen secretos, está a su disposición para llevar a familias o grupos de amigos a los lugares de su elección. No dejará de aconsejar a los viajeros a bordo sobre los mejores lugares para darse un baño, practicar submarinismo o hacer fotos Unas vacaciones al alcance de todos: en pareja, con amigos o en familia, seguro que encontrará el barco de sus sueños.

4- Alquiler de barcos, una desconexión total

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Realizar un crucero en velero, lancha o alquilar un catamarán durante varios días es una excelente forma de desconectar de la vida cotidiana. Podrá admirar la tierra y la actividad del litoral desde el mar. También puede aprender a distinguir las ciudades y sus monumentos. Un viaje itinerante que permite disfrutar de paisajes diferentes cada día y navegar de isla en isla. Una excelente forma de escapar de la rutina diaria, de cambiar de hábitos y de ralentizar el tiempo mientras se navega. No hay nada más que hacer que disfrutar de los dulces momentos con los suyos.

5- Alquilar un barco permite practicar numerosas actividades acuáticas

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Las vacaciones junto al mar, e incluso en el agua, le permiten practicar actividades deportivas acuáticas durante las cuales puede hacer ejercicio además de pasarlo bien. ¿Le gustaría descubrir algunas de las islas croatas más bellas en sus próximas vacaciones de verano? Según el modelo , puede llevar a bordo remos, kayaks o equipo de snorkel y buceo. Este equipo suele ofrecerse como opción. Para los veraneantes a bordo, esto significa que pueden disfrutar de sus actividades de ocio favoritas en los lugares de su elección, sin tener que apresurarse y hacer cola en los proveedores de servicios.