Los mejores alojamientos Rajasthan

Baratos / Chollos

Los principales centros turísticos ofrecen una gran variedad de hoteles, para todos los bolsillos y gustos. Los precios indicados corresponden a una habitación doble en temporada alta. Pero hay que tomarlos con precaución. Los hoteleros se han puesto al día desde que salió el Covid en 2022 y ahora dependen más de su mercado nacional que de los turistas extranjeros. Por otra parte, la India no es inmune a la inflación. Como consecuencia, los precios fluctúan constantemente.

La crisis del Covid-19, que cerró el país a los turistas durante 2 años, ha dejado huella. Los precios se dispararon con la recuperación en 2023, y las tarifas subieron casi sistemáticamente un 50%, ¡si no un 300%! El desarrollo del turismo interno ha permitido a la industria hotelera india mantenerse a flote a la espera de días mejores. Como consecuencia, los hoteleros ya no dependen de la clientela internacional y resulta prácticamente imposible negociar los precios, salvo en establecimientos muy baratos y a menudo de mala reputación.

En general, la limpieza de los hoteles económicos ha mejorado, sobre todo en los establecimientos que atienden principalmente a turistas extranjeros.

La abundancia de hoteles garantiza una competencia sana que mantiene los precios bajos. Sin embargo, la introducción en 2017 de un impuesto federal que complementa el impuesto local ha hecho subir los precios para los consumidores finales, sobre todo en los establecimientos de lujo. El impuesto es del 28% para las habitaciones de más de 7.500 rupias, del 18% para las de entre 2.500 y 7.500 rupias y del 12% para las de entre 1.000 y 2.500 rupias por noche. La mayoría de los establecimientos muestran precios sin impuestos, para seguir siendo atractivos.

En Rajastán, un hotel económico cuesta entre 750 y 2.000 rupias. Dispondrá de una habitación limpia, baño privado y toallas. Por un hotel boutique, hay que pagar entre 2.500 y 7.000 rupias por noche. En hoteles de lujo y palacios, la habitación doble cuesta entre 7.000 y 20.000 rupias. Estos hoteles suelen estar ubicados en antiguos palacios de maharajás magníficamente restaurados o en suntuosos havelis.

Los hoteles de Delhi son muy caros. No encontrará una habitación decente por menos de 2.000 rupias. Una habitación confortable en un hotel decente o un B&B no costará menos de 5.000 rupias por noche.

Algunas ciudades pequeñas carecen singularmente de infraestructuras hoteleras y turísticas, como es el caso de Mathura o Vrindavan, importantes centros de peregrinación a los que los indios acuden a pasar el día o a dormir en dharamsalas, albergues para peregrinos.

A reservar

Es imprescindible reservar con antelación durante la temporada alta, entre octubre y febrero, sobre todo en los alojamientos con encanto y buena relación calidad-precio de las ciudades. Dicho esto, siempre encontrará una habitación en la que alojarse, incluso a última hora, aunque quizá no en el hotel que busca.

Muy local

Muchos indios no dudan en compartir una habitación doble con el resto de la familia. A menudo meten a 4 ó 5 personas para abaratar costes. Sin embargo, esta práctica rara vez es tolerada por los hoteleros cuando se trata de turistas extranjeros.

Cuando llegue al hotel, le pedirán que rellene un registro con su nombre, dirección, duración de la estancia y número de pasaporte. El hotelero debe hacer una copia de su pasaporte y rellenar un formulario en línea, el C-Form.

Para los sibaritas

Los indios nunca desayunan dulces, sólo salados. Las especialidades del sur de la India, como los uttapams y las dosas, figuran entre los desayunos indios más populares. En los hoteles turísticos, siempre se puede elegir entre platos indios y pan, mantequilla, mermelada o huevos en el bufé.

Fumadores

Está prohibido fumar en los establecimientos abiertos al público. En Delhi está incluso prohibido fumar al aire libre, cosa que no ocurre en Rajastán.

Atrapa turistas

Los conductores de auto-rickshaw que le esperan a la salida de las estaciones pueden intentar convencerle de que el hotel que quiere visitar está cerrado, lleno, quemado... para llevarle a otro sitio. Por supuesto, esto no es cierto. El hotel al que quieren llevarle les paga una comisión. Dígales que tiene una reserva para cortarles el rollo.

En algunas ciudades donde hay escasez de hoteles, o durante festivales en los que todos los hoteles de la ciudad están llenos, es posible que el hotel no haya "recibido" su reserva. En realidad, el hotel habrá dado su habitación a un postor superior o querrá aumentar el precio de la noche de estancia, a veces de forma temeraria. Cuando haga su reserva, pida una confirmación por escrito en la que figuren las fechas, la tarifa y los servicios incluidos. La víspera de su llegada, vuelva a confirmarla y especifique su hora de llegada.