PUNK RECORDS
leer másFrancis Kremer es un cruce entre Astérix el Galo y su compinche Obélix. De cuello largo, pero algo menos rubio que el guerrero armoricano y sin bigote, este apasionado del pop-rock "en el sentido más amplio" ha caído en la música como el menhir en la poción mágica. Y, como los dos héroes, resiste. Una y otra vez. Ha superado dos grandes dificultades que podrían haber amenazado su negocio. La primera fue cuando la rue des Maréchaux se hizo peatonal y se especializó en comida "gourmet". La segunda llegó en los albores del año 2000, cuando el MP3 revolucionó la industria discográfica, relegando a los CD al cubo de la basura, después de que en los años 80 los discos de vinilo quedaran obsoletos. Sin embargo, su tienda está llena de estos objetos destinados a desaparecer. Es gracias a su pasión, su amplio conocimiento de la música y su increíble red de proveedores que ha podido establecerse como un incondicional desde 1974. Hoy, son los hijos de sus primeros clientes los que llaman a su puerta, mientras que los amantes del vinilo que han permanecido fieles al medio le piden una copia rara de los países vecinos o de Estados Unidos. No dude en visitar este paraíso del disco, hogar de joyas que no encontrará en ningún otro lugar de Nancy.