Los mejores bares y cafés Noreste

No puede venir a Fort Worth sin visitar este monumento a la cultura local. Billy Bob's alberga numerosos bares y restaurantes, una sala de conciertos, una pista de baile, una tienda, billares, máquinas tragaperras e incluso un gran cobertizo para rodeos. Todos los fines de semana vienen a actuar grandes artistas del country y el público se agolpa aquí con sombreros y botas. Los clientes habituales te invitarán a bailar. También se ofrecen clases gratuitas de baile en línea los miércoles por la noche y los sábados al mediodía.

Es uno de los locales nocturnos más concurridos del distrito de Stockyards. El saloon se dedica a mantener vivo el "Real West Spirit ", y cada fin de semana acoge a grandes artistas de música country. Durante la semana también hay conciertos de artistas locales. Cada 8 de febrero, el saloon recrea un gran tiroteo que tuvo lugar hace un siglo, para mantener viva la leyenda.

El jazz es menos común en Fort Worth que la música country, pero este bar lo ofrece. Así que, los que busquen jazz, tendrán que ir al Scatt Jazz Lounge, que ofrece un concierto casi todas las noches, a menudo gratis (siempre que se coma allí). No se puede reservar por teléfono para conseguir un asiento. Lo mejor es reservar por Internet. Todos los domingos hay una jam session nocturna, que suele deparar muy buenas sorpresas A menudo vienen a tocar aquí jóvenes promesas.

Parliament está considerado uno de los mejores bares de cócteles de Dallas, con mixólogos capaces de obrar milagros de creatividad con todas las bebidas espirituosas imaginables. En el menú, clásicos magníficamente ejecutados o invenciones totalmente originales. Y también un cóctel a base de extractos de cuerno de reno... algo verdaderamente inaudito. Lo recomendamos encarecidamente a quienes quieran experimentar y descubrir la ciudad de una forma diferente. El ambiente es cálido y moderno, y el establecimiento está situado en pleno centro.

Nos encanta este bar bastante elegante, rústico y de moda, en perfecta sintonía con Near Southside. Aquí sólo se toman cócteles maravillosos, a veces con nombres evocadores, con infusiones de lavanda, absenta, naranja e incluso matcha japonés... siempre muy agradables de beber. El ambiente se anima muy rápidamente, en cuanto llegan los jóvenes ejecutivos dinámicos después del trabajo, a los que les encanta reunirse allí para tomar una copa y relajarse después de un largo día. Los precios también son bastante razonables. No hay sorpresas en el menú.

El edificio se construyó en 1910 y en su día fue la farmacia de Fort Worth, Atlantic Coffee Co. una farmacia, una librería y, finalmente, Thompson's Bookstore Cocktail Lounge and Speakeasy. El ambiente es muy auténtico, con un viejo bar que recuerda a la época de la prohibición. Se ha mantenido el ambiente de la librería, con estanterías de libros, y desde fuera parece más una librería que un bar. Una forma de ocultar este bar clandestino a la antigua usanza. Los cócteles aquí son muy buenos. Siéntese en un sofá o en un sillón y relájese.

Esta coctelería es conocida por dos cosas: sus cócteles y su patio. Situado en un edificio histórico del Downtown, el patio exterior tiene vistas al gigantesco ojo del artista Tony Tassett. Es un recordatorio de la importancia del arte contemporáneo en Dallas mientras saboreas uno de los mejores cócteles de la ciudad. Si tienes hambre, no dudes en probar el menú, que ofrece clásicos Tex-Mex con una vuelta de tuerca. Por ejemplo, prueba el filete de carne ecológica, bacon de nuez, compota de bayas o queso de cabra de Texas.

Esta cervecería ofrece más de 30 cervezas artesanales de barril y casi otras tantas embotelladas. Es, sencillamente, el paraíso de los amantes del lúpulo. Nos encantan las mesas comunales donde puedes conocer a tus vecinos en un ambiente relajado. También puedes disfrutar de algunos platos básicos en la esquina de una mesa. Sirven hamburguesas con queso, cestas de patatas fritas, perritos calientes y también opciones vegetarianas. Sus cervezas artesanales incluyen tintos irlandeses y lagers ámbar.

Inaugurado en 1984, este bar, que rinde homenaje a uno de los mayores campeones de rodeos de todos los tiempos, Samuel Privett, no tardó mucho en hacerse un nombre. Es un auténtico bar de vaqueros, como demuestra la forma de sus sillas que evocan la silla de caballo. Su especialidad es la tequila, que propone numerosas marcas. Los amantes de la cerveza apreciarán el Buffalo Butt, servido en un cubo helado.

Este bar, que también funciona como sala de conciertos, es uno de los grandes nombres de la escena musical local. Bandas de la región y de otros lugares tocan todas las noches: una forma de descubrir la música local en un ambiente bueno y relajado. Los conciertos son a veces de pago, a veces gratuitos, pero nunca demasiado caros. Hay un festival de jazz y música llamado "Made in Denton" que dura tres días en abril. Le recomendamos que lo visite, ya que le garantizamos que verá buena música.

La dirección que recomendamos para tomar buenas cervezas, ya que ofrece una amplia selección en un relajado ambiente de pub inglés. Nos encantan las grandes mesas de madera del exterior y la música en directo que anima regularmente el local. Aquí, todo el mundo puede quedar con los amigos o leer el periódico mientras pasea al perro. También ofrecen algo para asentar el estómago, así que estupendos filetes, sándwiches, pretzels... Y apreciará las cabezas de vaca longhorn disecadas en la pared: un pequeño toque tejano para terminar.

Un pequeño café que resume el ambiente relajado de Near Southside. El café, de diversos orígenes, se tuesta in situ y se prepara con cariño. Todos los miembros del equipo de Avoca están comprometidos y se nota. La bollería que acompaña a la bebida también es bastante buena. Por último, el ambiente, industrial con sus techos altos y tuberías a la vista, pero confortable, encaja con la imagen moderna y trendy del lugar. Es una buena dirección si se busca un buen café para llevar a casa. También sirven muy buen té.

Como en Fort Worth, en Denton hay honky-tonk, entre el bar y la sala de conciertos, cuyo ambiente está sobrecargado durante los fines de semana. Rockin Rodeo es el líder de los honores de Denton. Allí se baila el madison y se escucha a las estrellas más grandes de la country. Ideal para bañarse en un ambiente local.

Una forma divertida de conocer la cerveza local, directamente en la fábrica que la fabrica. Dos veces por semana, la cervecería Rahr abre sus puertas al público y, por unos pocos dólares, se obtiene una pinta de cerveza y varias degustaciones. El ambiente es familiar y relajado. Algunas noches hay un concierto de música country. No olvide su pasaporte para poder probar las distintas cervezas. Los menores de 21 años pueden entrar, pero no probarlas

Abierto desde 1980, JR's es una institución en la comunidad gay de Dallas y Texas. Originalmente un bar muy pequeño, se ha ampliado varias veces antes de convertirse en lo que es hoy. En varias plantas, puede reunirse para tomar una copa tranquilamente en la barra o en un ambiente más lounge. El programa de eventos está disponible en Internet, e incluye espectáculos de travestis, concursos de bailes latinoamericanos e incluso noches de karaoke La diversión está garantizada.

El Gallery Rooftop Lounge es el bar del Canvas Hotel Dallas y ofrece unas vistas increíbles del horizonte de Dallas y del centro de la ciudad. La piscina del hotel está justo allí y puede traer sus cócteles aquí si la vista desde el bar no es suficiente. Una experiencia que no olvidará. Una dirección que se ha hecho muy popular, donde acude la juventud dorada. A menudo también hay DJs para bailar y disfrutar de veladas sociales.

Aquí se viene a degustar auténtica cocina tejana basada en productos de granja, carnes locales, pescados y mariscos, en un ambiente relajado; pero también por las cerca de cuarenta cervezas de barril que ofrece la carta, para tomar en las grandes mesas de madera del patio cubierto, y sobre todo para empaparse del auténtico ambiente tejano, con música en directo programada casi todas las noches de la semana. Un lugar estupendo para venir a pasar una buena tarde.