Los más bellos parajes naturales por descubrir Pembrokeshire

A esta popular zona de paseo se puede llegar en menos de 10 minutos en autobús. Una vez más, uno se maravilla de las extraordinarias vistas del mar, a pesar de la frecuente brisa marina. No dudes en cubrirte bien! Las balizas indican las rutas de dos paseos circulares que te llevan a lo largo de espectaculares acantilados. Uno está a 11,5 km durante unas 3,5 horas. También puede optar por su versión corta, de 5 km de largo, cortando el terreno. Una copia del itinerario detallado puede ser solicitada en la oficina de turismo.

Puede llegar a pie (3 km): diríjase al noreste por High Street hacia Feidr Fawr, y luego continúe por la B4546. Esta inmensa playa de arena blanca, situada en la desembocadura del estuario del Teifi, es absolutamente impresionante cuando está en marea baja y barrida por el viento Esta playa, la más septentrional de Pembrokeshire, marca el inicio, o el final, del sendero de las 186 millas de la costa de Pembrokeshire. En el aparcamiento situado detrás de las dunas (de pago en verano), encontrará una pequeña cafetería que sirve helados y empanadillas.

Con vistas a Jack Sound, el parque fue una vez diseñado para albergar ciervos, de ahí su nombre. En el siglo XVIII se construyó una muralla para definir una zona de protección de los animales que nunca fueron introducidos.

Hoy en día, el parque es muy popular entre los senderistas y ofrece vistas magníficas como Wooltack Point, donde a menudo se pueden ver focas y a veces marsopas, así como aves marinas. En la parte sur de la ruta, no deje de visitar el fuerte de la Edad de Hierro en Watery Bay.

También puedes salir del centro de la ciudad y explorar la Bahía de Whitesands(Porth Mawr en galés). Es ideal para la natación y es también el punto de partida para espléndidos paseos a lo largo de la costa. Los itinerarios detallados se pueden encontrar en el Centro de Turismo de St. David.

Situado en un promontorio rocoso, es uno de los faros más poderosos de Gran Bretaña. Al suroeste del faro se extiende una dentada bahía rocosa, una enorme mandíbula abierta al mar. Aquí no hay playa: la roca dentada cae abruptamente al mar. Caminar por los acantilados promete unas vistas espléndidas. En el lado este, siguiendo la costa, a unos 2 km del faro, nos encontramos con un acantilado que es el hogar permanente de las familias de focas. Strumble Head es también un lugar maravilloso para ver la puesta de sol.