LE BISTROT DU MUTIN
El Bistrot du Mutin, entre las piedras rubias y las paredes blancas realzado con pinturas coloridas o fotografías, micula una cocina donde la calidad y la frescura de los productos son irreprochables. Parqué rubio y mesas de madera más oscura, la decoración sobria de la sala es propicia para relajarse. En la plaza, tan pronto como los buenos días apunten al extremo de sus narices, la pequeña terraza del Bistrot es atractiva. Verduras frescas, carnes, aves de corral y peces elegidos con intransigencia, cada semana se sirve un plato diferente (paella, cuscús, kig ha farz) además de la fórmula y de una breve y alegre carta. Pesca del día o carne de buey, plato de quesos y un buen postre para terminar… El chef propone una cocina sencilla que canta los sabores.