PONT DE FSHAJT
Este moderno puente de piedra (Ura e Fshajtë, Švanjski most) salva el Drin Blanco aguas abajo del cañón. No es muy interesante en sí mismo, ya que fue construido por ingenieros italianos de la KFOR en 2005: un gran arco de 22 m de altura, una cubierta de 70 m de largo y 7 m de ancho. Pero tiene algunas bazas que jugar. En primer lugar, ofrece una hermosa vista del cañón con, justo al lado, el café-restaurante Ura e Shenjtë donde se puede aparcar fácilmente. En segundo lugar, desde 2014, este puente acoge una impresionante competición de buceo (Kërcimet nga ura e Fshejt) el tercer domingo de julio. Esta tradición se remonta a 1950 y en ella unos 30 jóvenes de los Balcanes compiten entre sí saltando 22 metros antes de entrar en el agua a más de 70 km/h. Un deporte peligroso, ya que el ganador de la competición de 2017 murió al año siguiente mientras intentaba defender su título.
¿Puente de Beni o puente de Svanes? También es interesante la historia del puente. Las dos versiones anteriores, mucho más elegantes, fueron destruidas en 1915 y 1999. Pero el origen de la primera estructura sigue siendo desconocido. Los habitantes albaneses hablan de un "puente otomano" construido en una época desconocida y rodeado de misterio. Lo llaman el "Puente Bendito"(ura e Fshajtë) o el "Puente Sagrado"(ura e Shenjtë), y cada versión va acompañada de leyendas llenas de magia y mujeres emparedadas vivas (un gran clásico balcánico). Los serbios atribuyen la construcción de la primera obra a su rey Stefan Uroš I (1243-1276). Esta suposición puede parecer nacionalista, pero en realidad es bastante creíble. En serbocroata, la estructura se llama "Puente de Svans"(Švanjski most). Los svanos son una etnia georgiana del Cáucaso, algunos de cuyos miembros se refugiaron en los Balcanes con los bizantinos durante la invasión mongola del reino georgiano en la década de 1220. Por ello, es muy probable que fueran los svanos los que construyeran el primer puente en la Edad Media: se sabe que algunas iglesias ortodoxas serbias o bizantinas de los Balcanes en el siglo XIII fueron construidas por "georgianos", que tenían fama de ser buenos albañiles en aquella época. Lo más extraño es que los svanos comparten muchas similitudes con los albaneses: como ellos, son montañeses, conocidos por sus cantos polifónicos, sus torres defensivas y un fuerte sentido del honor que da lugar a sangrientas venganzas. Esto crea un puente inesperado entre el Cáucaso y Kosovo.