FORT DE BALTIT
Entre los muchos pequeños Estados independientes que constituían las regiones del norte en los siglos XV y XVI, Hunza y Nager, situados a ambos lados del río de Hunza, eran los dos rivales tradicionales. Con el fin de consolidar su poder, los gobernadores de estos dos Estados construyeron varios lugares fuertes, entre ellos el fuerte de Baltit, que finalmente se convirtió en la sede del poder del Estado de Hunza. Construido en las cumbres de Karimabad por razones estratégicas, el fuerte domina el glaciar de Ulter y el valle. El imponente edificio de balcones de madera finamente esculpidos servía de fortaleza y residencia real.
El fuerte, rectangular, se eleva en tres plantas. La planta baja servía principalmente para almacenar las provisiones mientras que la primera planta era una gran sala abierta. La segunda planta, utilizada en invierno, albergaba una sala de audiencias, un cuarto de invitados, un comedor, una cocina y los barrios de los servidores. La tercera planta, de la que algunas partes están en el exterior, era más propicia a los meses cálidos. Se encontraban un comedor, una sala de audiencias, una habitación y una sala de recepción. Sólo en 1945 los príncipes de Hunza abandonaron finalmente el fuerte como residencia real en beneficio de un palacio más abajo.
El edificio fue magníficamente restaurado por la Fundación Aga Khan a finales de los años 1990 y hoy se encuentra en un estado admirable. La visita está organizada por un guía apasionante.