OLIJFBOOM
El Olijfboom (o el Olivo) te lleva a la dulzura del Sur, como una brisa de tramontana. Elegante y sencillo, este lujoso bistro con una decoración sobria y cálida, pero con cubertería de plata, le pondrá a gusto gracias a una sonriente bienvenida. Para esperar, mordisquee un palito de pan o una aceituna y observe las paredes que presentan una amplia selección de whiskies y coñacs de todas las edades. Los vinos no deben ser superados con más de 800 referencias, tanto francesas como internacionales. En el lado de la cocina, tu nariz estará alerta a los múltiples sabores que el chef está cocinando frente a ti. Podrás probar platos de calidad, cocinados según las estaciones y que tienen ese pequeño extra que no encontrarás en otros lugares. Pescado o carne, apreciará las sugerencias y sus bonitas presentaciones. Los títulos ya son evocadores: "ensalada de langosta con una vinagreta tibia de trufas" o "cochinillo con su salsa de pepinillos". El Olijfboom le ofrece una gran oportunidad de disfrutar de platos refinados en un ambiente ligero, de cara al sol en la encantadora terraza. ¡No me extraña que el chef haya sido premiado con un BIB Michelin Gourmet!