SINT PIETERSKERK

Situada en el centro de la Grand-Place, la iglesia Saint-Pierre es una obra maestra del arte gótico brabanzón. Construida entre los siglos ^XV y ^XVI, debería haber estado dominada por tres altas agujas, pero la inestabilidad del subsuelo lo impidió. Desde el interior del edificio se puede ver que las torres nunca se terminaron. Bajo las flamantes nervaduras, un enorme crucifijo de Bruselas ^{del siglo XV} domina el retablo gótico. Destacan las tumbas de los duques de Brabante en la girola y los dos trípticos del gran pintor Dirk (Thierry) Bouts, un primitivo flamenco ^{del siglo} XV: El martirio de San Erasmo y La Última Cena.

La iglesia está declarada monumento histórico desde 1937, y su campanario forma parte del grupo de "Campanarios de Bélgica y Francia" del Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1999.

La nueva disposición, diseñada en 2020 tras las obras de restauración del edificio, y las experiencias que se ofrecen a los visitantes son decididamente modernas y digitales. Los visitantes pueden ser guiados por el edificio mediante una tableta o unas HoloLens. Estas gafas de realidad mixta, que incluyen un miniordenador, auriculares y cámaras, proyectan hologramas e imágenes en 3D para dar vida a determinadas zonas de la iglesia o a obras de arte. Para quienes no estén preparados para probar la experiencia digital, hay disponibles un folleto e itinerarios familiares, aptos para niños pequeños, que le ayudarán a descubrir la historia del recinto y sus tesoros.