BASÍLICA DE SAN HUBERTO
Construida entre 1526 y 1564, la Basílica de San Huberto
Aunque el edificio actual se construyó entre 1526 y 1564, los primeros cimientos datan de principiosdel siglo VII. Las torres del siglo XIII se conservaron durante la reconstrucción. Se incorporaron a la nueva fachada clásica en el siglo XVIII. El visitante que entra por primera vez en la Basílica de los Santos Pedro y Pablo queda impresionado por su majestuosidad y elegancia, así como por el contraste entre la fachada barroca, algo pesada, y el esbelto interior gótico. Destacan las torres primarias góticas ( siglo XV), la fachada barroca (siglo XV), los altares laterales barrocos del Rosario (izquierda) y Santa Águeda (derecha), la magnífica sillería del coro con las vidas de San Huberto y San Benito, y el altar de San Huberto (crucero derecho). Este último contiene un relicario con la estola de San Huberto y reliquias de los santos Lamberto y Floriberto. La cripta fue restaurada después de 1525. Los muros y los extremos de las bóvedas actuales dan testimonio de los cimientos originales. En 2016, el edificio eclesiástico fue involuntariamente puesto en el candelero, al ser sorprendidos miembros del entramado eclesiástico excavando un túnel bajo la basílica en un intento de recuperar supuestas reliquias de San Huberto... El patrón de los cazadores es objeto de peregrinaciones desde hace casi 500 años, aunque no se sabe si está enterrado aquí.