GREENWICH CREEK LODGE
Lejos de las opciones costeras del norte de la isla, el Greenwich Creek Lodge te espera en una atmósfera intimista a orillas de la hermosa cala epónima. Un toque de sombrero para la propietaria Miriam Cartwright (que lo lleva muy bien), que pone de corazón a la obra para hacer de este lugar un verdadero remanso de paz con piscina, salón común, sala de lectura y gimnasio pañuelo para los incondicionales del fitness. Las 11 habitaciones son encantadoras y bien mantenidas, aunque las colchas floridas combinadas con las cortinas no sean del gusto de todos. Son preferibles las de cocina, más prácticas si te alojas unos días. Hay kayaks a disposición de los clientes para navegar por la bahía y llegar a la playa más cercana: tranquilidad garantizada. - y el agradable equipo estará encantado de organizar tus excursiones. También se puede alquilar un coche desde el hotel. ¡Una agradable dirección inteligente!