Guía de viaje La Pelosa

Unos kilómetros al norte de Stintino, a pocas brazas de Capo di Falcone, se encuentra una de las playas más bellas de Cerdeña. Su arena blanca y fina y sus aguas turquesas surcadas por rocas submarinas hipnotizarán hasta al más hastiado. El mar es ideal para bucear. Al final del arenal, la torre aragonesa de La Pelosa, del siglo VII, que delimita la playa, es de una belleza excepcional. A lo lejos, la isla de Asinara emerge de las aguas color Maldivas, mientras que da la impresión de que basta estirar el brazo para tocar la orilla de la isla de Piana. Sin embargo, en temporada alta, esta playa, que no es ni muy larga ni muy ancha, está masificada... al menos hasta el 15 de septiembre. El aparcamiento de pago frente al mar está tomado por asalto, y la idea de aparcar un poco más lejos se olvida rápidamente a la vista de las empinadas colinas que rodean la playa. Una gran parte de la playa ha sido ocupada por un bar que alquila tumbonas y sombrillas a precio de oro. Afortunadamente, en cuanto las multitudes estivales vuelven a su vida cotidiana, la playa de La Pelosa recupera su encanto inigualable y su belleza original.