Guía de viaje West Coast National Park

De septiembre a abril, ¡los migrantes queridos por Jacques Perrin están aquí! Miles de pájaros, de vacaciones desde la lejana Siberia, se ofrecen al verano africano en torno a la maravillosa laguna turquesa unida a la bahía de Saldanha: cerca de 140 especies de plumíferos en plena acción, en este territorio de dunas y marismas de 30.000 ha. Descúbrala en coche (dos entradas posibles por la R27; prevea 4 horas; de 9 a 17 horas) o a pie por los senderos. Este parque se creó en 1985 para proteger la laguna de Langebaan y los islotes a los que migran decenas de miles de aves cada primavera. Los especialistas estiman que es el cuarto santuario de aves más importante del planeta (flamencos, chorlitos, andarríos, correlimos, cormoranes, alcatraces). En la laguna, de 16 km de largo y 4,5 km de ancho, hay considerables depósitos de conchas de ostras de entre tres y siete metros de grosor; según los científicos, un cambio brusco de la temperatura del agua del mar provocó la muerte de estos millones de moluscos. En agosto de 1844, se contaron más de trescientos barcos en la bahía al mismo tiempo; la isla de Malgas, cubierta por una capa de diez metros de guano, atraía a todos los empresarios europeos. Llueve principalmente entre mayo y agosto. Luego llega la primavera más florida: desde la laguna hasta Namaqualand, en el norte, la tierra se cubre de flores (margaritas, gazanias, plantas mesembriantes). Durante este periodo(del 1 de agosto al 30 de septiembre), la dirección del parque permite el acceso de los visitantes (de 9 a 17 horas) a la sección silvestre del Postberg (Oude Post data de la época de Jan van Riebeeck). Los veranos son calurosos y secos, con las tradicionales nieblas matinales.En 1995, el geólogo David Roberts descubrió aquí las huellas más antiguas dejadas porel Homo sapiens. Fosilizadas en piedra arenisca, estas huellas de 20 cm de longitud fueron hechas hace 117.000 años, probablemente por una mujer joven de 1,60 m. En comparación, las huellas de la cueva de Chauvet, en Francia, están datadas entre 20.000 y 30.000 años atrás.