Guía de viaje Santuário Ut Caraça

Por su riqueza en biodiversidad y la belleza de sus parajes, el Parque Natural de Caraça es un destino excepcional que abarca 11.000 hectáreas y se ha convertido en una importante reserva ecológica. La fauna local -una de las más diversas del centro de Brasil- incluye roedores como el caxinguelê, felinos como el gato maracaja y el puma, el tapir y el lobo de crin, animal símbolo del Parque de Caraça. La excepcional riqueza de la flora y la fauna de Caraça se explica por la ubicación de la región, en una zona de transición entre el bosque atlántico y el Cerrado, a altitudes que oscilan entre los 750 m y los 2.100 m. Las diferencias climáticas permiten la coexistencia de ecosistemas muy diferentes en un área relativamente pequeña.Es aconsejable pasar aquí al menos dos días para disfrutar de los infinitos matices de la belleza del parque, a menudo situado a varios kilómetros a pie. Todos los días, los visitantes pueden elegir entre una amplia gama de senderos que conducen a cuevas, cascadas y picos rocosos, el más alto de los cuales se eleva a 2.072 metros. El lugar está muy bien conservado y se presta perfectamente al ecoturismo. El alojamiento está disponible dentro del propio parque. Se puede dormir en el santuario de Caraça, creado por Dom Pedro I. Si tiene suerte, podrá ver a los tímidos lobos de crin que el difunto Padre Tobías solía alimentar nada más llegar a casa.