FAIRMOUNT WATER WORKS

A finales del siglo XVIII, tras las violentas epidemias de fiebre amarilla, los líderes de la ciudad tuvieron que pensar en un modo de garantizar un suministro constante de agua potable sin contaminar. La respuesta se encuentra aquí: el río Schuylkill y un ingenioso sistema de turbinas cubrieron las necesidades de Filadelfia en agua corriente de 1815 a 1909.

El centro de interpretación permite comprender el funcionamiento de entonces y se da por misión sensibilizar sobre la importancia del agua para evitar el despilfarro. Los jardines que rodean la orilla son también muy agradables y románticos, con pequeños pabellones de columnas de estilo Greek Revival para contemplar el panorama a la sombra antes de subir al Filadelfia Museo de Arte.