FIRMA DE HOLLYWOOD
Nueve letras blancas encaramadas en el Monte Lee, en el Parque Griffith, con varios senderos para acercarse.
Si estas nueve letras blancas encaramadas en el monte Lee, en Griffith Park, son hoy el símbolo de la industria cinematográfica, se erigieron por razones que nada tenían que ver con el séptimo arte. En 1923, la pequeña ciudad de Hollywood y sus colinas empezaban a atraer a nuevos residentes de todo el país -con la Costa Este a la cabeza- que venían a probar suerte en una región con sol casi permanente y una economía en auge. La aparición de una élite cinematográfica contribuyó al desarrollo de Hollywood, y poco a poco fueron surgiendo restaurantes y clubes nocturnos en Sunset Boulevard y Hollywood Boulevard. Para fomentar el crecimiento de la ciudad, el promotor inmobiliario Harry Chandler encargó la construcción de las cartas de Hollywoodland. Originalmente de 13 metros de alto y 9 de ancho, estaban iluminadas por unas 4.000 bombillas intermitentes.
Un letrero llamativo, como la industria de los sueños... Pero cuenta la leyenda que el lugar está embrujado por la actriz Peg Entwistle. Prometida una carrera de éxito en Broadway, la joven vino a probar suerte a Hollywood en 1931. Tras un año intentando en vano conseguir un papel, se suicidó saltando desde la letra "H". Desde entonces, se ha convertido en el símbolo del lado oscuro de Hollywood, el que destroza los sueños de los artistas en busca de fama y fortuna.
Con la Gran Depresión que azotó el país en 1929, muchas empresas se vieron obligadas a cerrar, como fue el caso de la compañía de Harry Chandler a principios de la década de 1940. El Hollywoodland Sign fue comprado por la ciudad en 1944. Cinco años después, la Cámara de Comercio de Hollywood decidió retirar las cuatro últimas letras. Las letras restantes se deterioraron y tuvieron que ser retiradas y sustituidas en 1978 por las que conocemos hoy. Aunque se suponía que iba a ser desmantelado apenas un año y medio después de su instalación, el letrero de Hollywood sigue en pie un siglo después, dando testimonio de una industria a la que ha visto crecer.
Hoy, el acceso a las letras está bloqueado por una alta valla: no es posible acercarse a menos de 100 metros. Sin embargo, hay varias rutas de senderismo que permiten acercarse a ellas: la fácil Mt. Hollywood Trail, la moderada Brush Canyon Trail y la desafiante Cahuenga Peak Trail. Una actividad divertida, que además le proporcionará una buena panorámica del Parque Griffith. Para ayudarle a planificar su ruta, visite el sitio web oficial de la señal.