CASA-MUSEO SARIAN DE MARDIROS

En esta pequeña casa, iluminada por un gran techo de cristal, vivió el gran pintor armenio del período soviético Mardiros Sarian (1880-1972), donde tenía su estudio y donde se conservan unas cincuenta obras de este prolífico artista. A pesar del carácter oficial de su pintura, que le valió la fama en toda la URSS, donde disfrutó de todos los honores como miembro de la nomenclatura, y que le permitió pasar por la censura, Sarian siguió siendo querido por los corazones de los armenios. Le estamos agradecidos por haber podido transcribir sobre el lienzo la esencia de la naturaleza armenia, el color y el brillo de sus paisajes y la expresividad de sus rostros. Su casa-museo sigue siendo un lugar de peregrinación. Entramos en la intimidad de este pintor nacido en el sur de Rusia, que estudió en la Escuela de Bellas Artes de Moscú, luego trabajó con los impresionistas, participó en un grupo simbolista, frecuentó a Matisse, Van Gogh o Rodin o Maillol, cuyas influencias le influenciaron, fue fauvista, post-impresionista, pero poco atraído por el orientalismo, antes de caer bajo la bandera del realismo cuando se impuso, en la URSS, poniendo fin a la creatividad de los años revolucionarios. Este "cervato azul", sin embargo, por sus matices, se presentaba como un colorista poco convencional, que sabía comprometerse con los dictados de la censura para exaltar, en unos 5.000 lienzos, la naturaleza y el pueblo de Armenia.