MONASTERIO DE ARDENICA

En este prestigioso monasterio ortodoxo del siglo XIII (Manastiri i Ardenicës) se celebró el matrimonio de Jorge Kastriot Skanderbeg con Marina Donika Arianiti, hija de un jefe de clan local, el 21 de abril de 1451. Con una decena de monjes en la actualidad, es el único complejo monástico ortodoxo activo de Albania. Apodado «castillo de la Myzeque», está dedicado a la Natividad de la Virgen Theotokos (Madre de Dios) y goza de un bello emplazamiento en la colina de Ardenica, que domina la llanura de Myzeqa, a 237 m de altitud. Reformado varias veces, fue fundado en 1282 por el emperador bizantino Andrónico II Paleólogo para celebrar su victoria sobre Carlos de Anjou tras el asedio de Berat (1280-1281). Sin embargo, conserva algunos elementos más antiguos, en particular la capilla de la Trinidad (a la derecha al entrar), que data del siglo X. Esta capilla parece haber sido construida en el emplazamiento de un antiguo templo dedicado a la diosa griega Artemisa (de donde procede el nombre de Ardenica).

Frescos y la primera inscripción en albanés. En 1743, en plena época otomana, el complejo se benefició de la generosidad de los comerciantes arrumanos de Moscopole, que financiaron la construcción del catholicon (iglesia principal). La iglesia, bien conservada, está dominada por un campanario de 24 m de altura e incorpora materiales del yacimiento de Apolonia en Iliria (se pueden ver columnas antiguas en el lado norte). El interior está cubierto de frescos pintados en 1744 por los tres artistas más renombrados de la escuela de pintura de Korça: Konstantin Shpataraku y los hermanos Konstantin y Athanas Zografi. Un fresco en particular conserva el primer texto escrito en albanés que se inscribió en una iglesia: «Virgjin ë Mame eperndis uro prë nee faj torëte» («Virgen y Madre de Dios ruega por nosotros [pobres] pecadores»).

En la segunda mitad del siglo XIX, Ardenica se convirtió en un importante centro intelectual y desempeñó un papel activo en el movimiento Rilindja Kombëtare (Renacimiento nacional), sobre todo organizando cursos de lengua albanesa. Pero en 1932, el complejo fue destruido por un incendio, con la consiguiente pérdida de manuscritos de valor incalculable. Ardenica sufrió entonces un largo declive. En 1967, el obispo ortodoxo Irene Banushi (1906-1973), figura destacada de la oposición religiosa al régimen de Enver Hoxha, salvó el monasterio convenciendo a los estudiantes que habían venido a destruirlo de su valor histórico, destacando en particular el recuerdo del matrimonio del héroe nacional Skanderbeg.