Guía de viaje El Cabo- Antibes

Magnífica península, símbolo de la Costa Azul y cruce sublime entre Antibes y Juan-les-Pins, Cap d'Antibes es un lugar privilegiado y residencial donde la vegetación mediterránea ha conservado el lugar que le corresponde. Recorrerlo en coche o en bicicleta por la carretera costera, o sobre todo a pie por el camino de la aduana, es una auténtica delicia. Al este, las cumbres nevadas del Mercantour contrastan con el Mediterráneo. Al Oeste, las cumbres del Estérel se elevan sobre las islas Lérins. A menudo, un mar de aceite con aguas topacio acaricia las finas arenas del litoral, a veces las olas zafiro rompen contra rocas blancas afiladas como cuchillas.A través del verdor que forma una pantalla natural, se divisan algunas de las suntuosas propiedades, cuidadosamente protegidas. El palacio Eden-Roc, enclavado en una finca de 8 hectáreas, es sin duda la joya más bella del cabo, y recibe a estrellas y personalidades de todo el mundo, sobre todo durante el Festival Internacional de Cine de Cannes. Inaugurado en junio de 1870, el estadounidense Gordon Bennett lo relanzó mucho más tarde patrocinando las primeras carreras automovilísticas. Ampliado en 1914, se convirtió, junto con el Negresco de Niza y el Carlton de Cannes, en el arquetipo de palacio suntuoso de la Costa Azul.Afortunadamente, en el Cap d'Antibes no todo es lujo: también ofrece magníficos paseos en plena naturaleza, a orillas del mar o un poco más elevados, para disfrutar siempre del magnífico paisaje. ¡No se lo pierda!