LA VIUDA DE JOSÉ IGNACIO
Un hotel reciente que se ha imaginado y gestionado por Oswaldo Muratorio, un argentin que antiguamente era decorador de interior. Construida en un entorno natural, salvaje y relajante, a 200 metros de la playa, la Viuda de José Ignacio consigue la apuesta de mezclar confort ultra moderno y sencillez, en aras del respeto de la naturaleza (las especies vegetales plantadas no necesitan agua). Cada habitación tiene televisión Appla pantalla plana, terraza privada con tumbonas, bañera de hidromasaje, camas de lujo en king size, caja de seguridad, aire acondicionado, conexión Wi-Fi. La decoración sobria y depurada es de muy buen gusto. Las habitaciones, originadas originariamente, no llevan números, pero están diferenciadas por una escultura única realizada por la artista uruguayca Veronica Artacaveytia que, además, tiene un taller abierto al público en el corazón del pueblo. Hay otras esculturas en el jardín, cerca de la piscina. Mezclando con delicadeza el antiguo y el diseño, el hotel está bien distribuido con espacios muy ventilados. Los objetos y muebles que datan de los años 1950-60 han sido desacreditados por Oswaldo mismo, después reciclados o renovados. Cada objeto se funde perfectamente con la decoración. Para su propietario, lo más importante es que el cliente "se sienta cómodo"; describe su hotel como un lugar "sencillo pero cómodo, donde la atención al cliente prima sobre todo". ¡Y esto es realmente exitoso! Delicioso desayuno elaborado con productos frescos, todo es casero. Un excelente lugar aconsejable.