Parques y jardines
Los numerosos jardines y parques de la ciudad son una delicia para explorar. El Port d'Ouchy, el bosque de Sauvabelin, el Parc Mon-Repos, el Chemin de la Vuachère, el Parc de Milan, el Crêt de Montriand, el Parc Olympique y el Parc de la Plage Saint-Sulpice son algunos de los principales parajes naturales. El jardín botánico, repartido en varios niveles, ofrece espléndidas vistas. Verdadero remanso de paz, es también, y sobre todo, un lugar dedicado a la conservación de especies y a la investigación y difusión de conocimientos. Nunca se cansará de pasear por las orillas del lago Lemán. La llanura de Mauvernay es ideal para los visitantes que buscan una escapada forestal o un recorrido deportivo. El parque natural periurbano de Jorat, situado en la ciudad de Lausana, es una zona extremadamente dinámica. ¿Su misión? Preservar la biodiversidad del único bosque contiguo de la meseta suiza, promover su patrimonio cultural, apoyar a la industria maderera y acoger y educar al público. https://jorat.org
Lausana está muy implicada en el ecoturismo, por lo que se pueden visitar bodegas, degustar productos locales en posadas centradas en el ecoturismo o visitar las terrazas efímeras y los bares a orillas del lago. Los bares del lago ofrecen un marco sublime y abren todos los veranos de junio a septiembre. Los jinetes, excursionistas y ciclistas estarán encantados con los senderos señalizados. El sendero de Lausana a Montreux, a lo largo de los viñedos de Lavaux, es imprescindible, en el corazón de un entorno excepcional, con visitas a bodegas como parte del itinerario.
Movilidad suave
La ciudad está comunicada por la red ferroviaria suiza y europea. Hay enlaces directos entre París y Lausana. La red de transporte público está bien desarrollada (metro, autobuses eléctricos y de gas natural). El pago de la tasa turística da derecho a la tarjeta Lausanne Transport Card & More (LTC), que permite utilizar gratuitamente los transportes públicos de la aglomeración. Además de a pie, es fácil desplazarse en bicicleta por la ciudad, que cuenta con un sistema de autoservicio de bicicletas. También se puede pedalear alrededor del lago, que a su vez está conectado con rutas ciclistas europeas (en particular, EuroVélo 17).
Reducir, reutilizar, reciclar
En Lausana, la recogida selectiva de residuos se realiza puerta a puerta, así como en puntos de entrega voluntaria y centros móviles de recogida de residuos. Los residuos domésticos que no pueden reciclarse se recogen utilizando bolsas gravadas, es decir, bolsas compradas por los residentes. Esta medida es un incentivo para clasificar mejor y reducir los residuos. En cuanto a la prevención de residuos, en 2020 se puso en marcha una campaña para concienciar a los residentes sobre la contaminación por plásticos en el lago Lemán, que representa unas 55 toneladas de residuos al año. La basura abandonada en los espacios públicos (colillas, envases de alimentos, etc.) representó 4,5 t de residuos en 2017. Para combatir esta situación, la ciudad ha organizado una jornada de sensibilización, que consiste en exponer la basura recogida en un día. También ha introducido un sistema de multas para castigar este tipo de prácticas. Con el espíritu de cero residuos, en Lausana están apareciendo tiendas que promueven los productos a granel, comercios que venden artículos de segunda mano y buzones de donaciones (libros, etc.). Sin olvidar el Festival des Ressources, en septiembre. Su objetivo es dar una nueva vida a los objetos. Habrá talleres de reparación de objetos rotos, venta de vestidos, talleres dirigidos por artistas del reciclaje, mercadillo de juguetes y bicicletas, sin olvidar la "venta de neveras" y los talleres de serigrafía de camisetas viejas. Los niños podrán incluso fabricar sus propios objetos con materiales reciclados. Una idea excelente.
Enfoques participativos y festivales
Lausana cuenta con una veintena de huertos y "plantaciones comunitarias", donde los vecinos pueden cultivar sus propias hortalizas. En toda la ciudad se celebran festivales medioambientales. Entre ellos, el Festival de la Terre, la Fête de la Forêt y Lausanne Jardins, algunos de los cuales se han perpetuado en la ciudad (la fachada verde de la rue de Genève y el huerto urbano). En el ámbito de la movilidad blanda, cabe citar también Cap sur l'Ouest lausannois y el festival Voyage à vélo en la Suiza francófona.
Objetivo
¡Árboles, árboles y más árboles! Dejar paso a la naturaleza: ésta es la nueva estrategia de las autoridades de Lausana. ¿En qué consiste? Dar más "derechos a los árboles". Por fin, ¿había que esperar miles de años para que se reconociera el efecto único de los árboles sobre el clima? 25.000 árboles se añadirán a la cubierta vegetal existente, con 1.500 plantados cada año. Los árboles tienen un innegable efecto natural de climatización: en la ciudad, ayudan a reducir la temperatura cinco grados. Se plantarán en todos los espacios imaginables, desde piscinas hasta escuelas. ¡Cuidado con los coches! Hemos decidido ponérselo difícil, y cada vez se dedicarán más espacios a los vehículos de dos ruedas. De hecho, Lausana ha obtenido la etiqueta de "Ciudad Verde" para 2021. De este modo, la ciudad vuelve a dar paso a un entorno natural cada vez más "salvaje". Se están creando callejones de flores silvestres, setos a lo largo de las aceras, muros de piedra seca, tejados verdes, pequeños refugios para la fauna, árboles plantados, huertos tradicionales, huertas y estanques. Las ovejas han recibido una nueva misión: actúan como "cortacéspedes" de los espacios verdes, como verás en el parque del Museo del Hermitage, por ejemplo. Hemos pensado en todo Lausana cuenta ahora con 350 hectáreas de parques y bosques, por lo que la naturaleza ocupa un lugar privilegiado, proporcionando un soplo de aire fresco en una ciudad donde se vive bien. Lausana apuesta por el desarrollo sostenible y, como reza uno de sus eslóganes turísticos, es "una ciudad en verde para ver la vida en rosa". Así que ¡abra paso a los colores naturales!
