Guía de viaje Tromsø

Tromsø es, definitivamente, una ciudad viva. En esta localidad de 77000 habitantes, a las puertas del Ártico, la gente sale toda la semana, y aún más en invierno. Mientras la nieve cubre la ciudad con un manto blanco, los bares están llenos. En esta ciudad universitaria desde 1960, se mezclan profesores y estudiantes. Tromsø vio proliferar los locales de ocio en los años ochenta. En aquella época, cuando los bares cerraban a medianoche en Oslo, en Tromsø permanecían abiertos hasta las tres de la madrugada, lo que incrementó su reputación de ciudad de fiesta. El título de «capital del norte de Noruega» siempre se lo han disputado Tromsø y Bodø. Aunque Bodø lo lleva oficialmente, la mayoría de los noruegos viven en Tromsø, donde se encuentra la catedral más septentrional del mundo. En general, todo lo que vea o haga aquí será lo más septentrional de Europa o del mundo.Tromsø está situada en una gran isla unida al continente por un puente de un kilómetro, a más de cuarenta metros sobre el estrecho. En el lado que da al mar, la ciudad está protegida del mar abierto por la gran Kvaløya o Isla de las Ballenas. El centro conserva algunas de sus antiguas casas de madera. El corazón de Tromsø es Vestregata, su calle principal: «La calle principal es nuestro teatro». Aquí sucede todo: desde los rótulos de las tiendas más antiguas hasta la salida del Maratón de la Noche Polar y las fiestas sami en febrero. La palmera de Tromsø, que verá en muchas esquinas, parece una planta verde gigante. Puede medir hasta tres metros de altura. En contraste con la vegetación más modesta de las montañas del Extremo Norte, es una planta importada que se ha aclimatado bien, sobre todo en la isla de Tromsø.Una vez rotos los monopolios de Bergen y Trondheim, Tromsø pudo desarrollar su comercio basado en la pesca y la caza de ballenas. Fue aquí donde los exploradores reclutaron sus tripulaciones y donde comenzaron las mayores expediciones polares, entre ellas las de Nansen y Amundsen. La ciudad ártica de Tromsø sigue siendo el mejor punto de partida hacia el archipiélago de Svalbard (Spitsbergen). A principios del siglo XX, cuando los primeros turistas llegaron a Tromsø, encontraron teatros, gente educada abierta al mundo y a la política, a la moda… Hoy en día, aunque la ciudad universitaria rebosa de actividades culturales y nocturnas, este no es el motivo que atrae a la gente. Tromsø es un lugar de carácter fuerte: «Las mejores palabrotas están en el Norte, el silencio está en Oslo». Según los tópicos noruegos, los tromsøværing (habitantes de Tromsø) son optimistas y rápidos en sus réplicas. Es cierto que, en condiciones difíciles, el sentido del humor en el día a día es innegablemente un plus para sobrevivir a los períodos de oscuridad. La ciudad alberga las fábricas que producen la cerveza más popular de Noruega, Mackøl, reconocible por el oso blanco de las latas. En el puerto, los antiguos bares de marineros, entre ellos la famosa posada del Cormorán (Skarven en noruego), se han convertido en lugares de encuentro muy de moda. En verano, la gente sale toda la noche, a plena luz del día, gracias al sol de medianoche. A veces incluso se puede correr toda la noche, durante el Maratón de Medianoche de Tromsø, famoso por empezar a las 12 en punto. Más información: www.msm.no.Y cuando llega el invierno, esperamos que la aurora, la caprichosa dama verde, esté allí para bailar en el cielo. Suele aparecer entre las seis de la tarde y la una de la madrugada.