Guía de viaje Longyearbyen

Longyearbyen es el centro administrativo de Spitsbergen y constituye el límite de la civilización en el hemisferio Norte. La mayoría de sus habitantes no viven aquí permanentemente, sino que trabajan durante el invierno para Det Store Norske (la mayor empresa minera de carbón de Noruega) con un contrato anual -con un salario muy alto- y mantienen su vivienda principal en tierra firme. Sin embargo, algunos de ellos descubrieron en Svalbard una forma de vivir más cerca de la naturaleza y se instalaron allí con sus familias durante años. Los científicos investigan el agujero de ozono y la flora y fauna del Ártico. A estas personas hay que añadir el turismo "extremo", que se está desarrollando con bastante fuerza. Antiguo pueblo tradicional, Longyearbyen se ha convertido con los años en una ciudad moderna con multitud de comercios e industrias. El aeropuerto, inaugurado en 1975, comunica el archipiélago con el resto del continente. Muchos se sorprenderán al saber que la ciudad ofrece una amplia gama de actividades culturales (incluidos dos museos muy interesantes). También es, por supuesto, el punto de partida de la mayoría de las atracciones turísticas de Svalbard. Para los que decidan quedarse un rato, hay varios bares y restaurantes. La población de la ciudad lleva varios años creciendo. Como consecuencia, se ha ido modernizando y dotando de infraestructuras que se prestan a acoger turistas. La ciudad acoge a mineros, investigadores, estudiantes y un número creciente de turistas que buscan una experiencia fuera de lo común. Como resultado, esta antigua ciudad minera se está convirtiendo poco a poco en una capital con una interesante diversidad étnica. Más de 40 naciones están representadas aquí.