CANYON STUDLAGIL
El cañón de Stuðlagil es, en nuestra opinión, el más bello de Islandia, ¡y merece la pena! Sus encantadoras aguas turquesas sólo tienen parangón con las columnas de basalto que lo rodean, lo que lo convierte en un espectáculo realmente sobrecogedor.
Para llegar, desde la Ruta 1, hay que tomar la Ruta 923 (hay una señal que indica hacia el cañón). Hay que recorrer unos veinte kilómetros por una carretera de grava. Puede admirar el cañón desde el este aparcando en el aparcamiento cercano a la granja Klaustursel, o desde el oeste aparcando en la granja Grund.
Para contemplar el cañón más de cerca, lo mejor es tomar la ruta este. Aparque en el aparcamiento y comience la caminata a lo largo del río tras cruzar un puente de madera. Todo está muy bien señalizado, así que no te preocupes. Por el camino, admire la cascada de Stuðlafoss y continúe hasta llegar a la parte más bonita del cañón, aproximadamente 1 hora después de empezar a caminar.
Desde aquí, disfrute de las vistas y haga tantas fotos como pueda Es posible descender hasta el fondo del cañón, pero ten cuidado. Las rocas pueden estar resbaladizas y puede haber una fuerte corriente si te caes (además del riesgo de darte un buen chapuzón).
El sitio está muy concurrido en verano, pero también es cuando las aguas del cañón están más bonitas Para disfrutar del lugar con más tranquilidad, puede que merezca la pena alojarse en uno de los alojamientos cercanos, como un hotel o un camping.