VILLA BADOER
Una de las villas de la provincia de Rovigo, patrimonio mundial de la Unesco.
Entre las villas de la provincia de Rovigo, la Villa Badoer, también conocida como "La Badoera", construida en 1556 por Andrea Palladio a petición del noble veneciano Francesco Badoer, es la más prestigiosa. Se construyó en el emplazamiento de un antiguo castillo perteneciente a la familia Salinguerra da Este. El propio Francesco Badoer lo recibió de su matrimonio con la aristócrata veneciana Lucietta Loredan. La villa, que era el epicentro de las vastas explotaciones agrícolas, debía demostrar el poder casi feudal de la familia Badoer sobre el territorio. A la imponente fachada del edificio central, residencia de los nobles propietarios, se accede por una majestuosa escalera que conduce a un gran pronaos con seis columnas. En los laterales, dos pórticos semicirculares completan la estructura. Las paredes del pronaos y las del interior (finales del siglo XVI) están decoradas con grotescos, obras de Giallo Fiorentino que representan figuras alegóricas. Los significados de algunos de estos frescos siguen siendo un misterio, aunque las alegorías mitológicas de varios de ellos suelen estar relacionadas con los acontecimientos y vicisitudes de las familias Badoer y Loredan. Curiosamente, la primera planta se utilizaba como almacén de grano. El ático sigue teniendo la estructura original de madera y juncos. En la barchessa (la nave agrícola) de la villa se encuentra el Museo Arqueológico Nacional. Expone los restos prehistóricos encontrados en la zona, evidencia de las primeras poblaciones del Delta del Po. La Villa Badoer es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.