CUPOLA DI BRUNELLESCHI

La cúpula de mampostería más grande del mundo, con sus treinta y siete mil toneladas de ladrillos y tejas encaramadas a 115 metros sobre el vacío. Elemento característico de la arquitectura romana, la fascinante cúpula de la catedral de Santa María del Fiore ilustra el deseo de Florencia de ser la nueva Roma, al tiempo que simboliza el dominio de la ciudad sobre toda la Toscana.

De 1420 a 1436, los florentinos contemplaron con asombro cómo se elevaba hacia el cielo la inmensa cúpula de su nueva catedral, financiada por Cosme el Viejo, el hombre más poderoso de Florencia. Coqueteando con los límites de la arquitectura (casi 50 metros de diámetro), la obra fue una verdadera proeza técnica, que exigió a Filippo Brunelleschi (1377-1446) inventar nuevos métodos de construcción. Las particularidades son numerosas: ocho arcos que se juntan perfectamente en la parte superior, un tejado doble (la cúpula exterior protege a la interior de las variaciones atmosféricas, y ambas están unidas por ramas), bóvedas decoradas por Giorgio Vasari (1511-1574) y Federico Zuccari (1540-1609) con un inmenso fresco que representa el tema del Juicio Final.

En lo alto de la cúpula, el globo terráqueo original de cobre dorado fue diseñado con la ayuda de Leonardo da Vinci, fundido e instalado entre 1466 y 1471, tras la muerte de Brunelleschi. Fue alcanzado por un rayo el 16 de febrero de 1600, causando grandes daños a la catedral (el lugar se indica con una placa). Dos años más tarde se volvió a colocar un nuevo globo, de 1.980 kg de peso, ahora protegido por un moderno sistema pararrayos.

La cúpula de la catedral de Santa Maria della Fiore, para cuya construcción se necesitaron casi cuatro millones de ladrillos, se ha convertido en el emblema de Florencia, así como en el símbolo mismo del Renacimiento. En términos de volumen, es la mayor cúpula de mampostería jamás construida por el hombre.

¿Cómo consiguió Filippo Brunelleschi, que originalmente era orfebre y no arquitecto, diseñar un edificio tan sólido y elegante? Aún hoy, esta cúpula sigue siendo uno de los grandes misterios de la historia del arte. En efecto, Brunelleschi creó la arquitectura de una nueva era, que se siguió durante siglos, pero no dejó constancia escrita de la construcción de la cúpula...

Aspectos prácticos: es obligatorio reservar para visitar la cúpula. Se accede por la parte izquierda de la catedral (en la Puerta de la Mandorla). Hay que subir unos 460 escalones