BASÍLICA DE SAN LORENZO MAGGIORE (BASÍLICA DE SAN LORENZO MAGGIORE)
Esta iglesia es un testimonio importante del papel de Milán en las épocas romanas y paleocristianas. Está precedida por 16 columnas romanas corinthianas procedentes de un templo del siglo III a. C., columnas a las que se accede al parche donde se eleva la estatua del emperador Constantin. Aunque varias veces reconstruyen y reconstruyen, la iglesia ha conservado en parte su estructura original del siglo IV. Sin embargo, es el producto de una superposición de elementos paleocristianos, novelas, renacimiento y barrocas. Su fachada es del siglo XIX y su imponente cúpula (la más grande de Milán) de principios del siglo XVII. En el interior, conserva varios elementos de la basílica primitiva: la capilla di Sant'Aquilino (siglo IV). J.C.), decorada con magníficos mosaicos de inspiración bizantina, vestigios de frescos paleocristianos así como las capillas de San Ippolito y San Sisto.