PALAZZO BIANCO

En el elegante marco de un palacio del siglo XVI (modificado en el siglo XVIII) con jardín en el patio, la pinacoteca ilustra la evolución de la pintura figurativa en Génova del siglo XVI. Los pintores genoveses más famosos están expuestos así como los primitivos flamencos y holandeses y los grandes maestros italianos, franceses y españoles.

El recorrido se abre con la Virgen de Luca Changaso, seguida por la mayoría de los representantes de la escuela genovesa. Las demás salas dedicadas a la pintura italiana acogen entre otras las telas de los pintores Veroneso, Palma le Joven, Procaccini y el extraordinario Ecce Homo de Caravage. Una pequeña distracción al entresol con una exposición de ropa, accesorios y lencería de época, que ilustra la evolución de la moda femenina del siglo XVII del siglo XX (notar la increíble colección de bordados antiguos).

La segunda planta retoma con la pintura, haciendo la parte bella del manierismo florentino; entre las obras notables; un Santo Sebastián entre los Santos de Filippino Lippi y un retablo de Bernardo Strozzi. Una vez atravesado el gran salón de recepciones -pieza maestra del Palazzo Bianco- la visita continúa con los tellos flamencos. No te pierdas el sorprendente Cristo Bendita de Memling, una versión de Marte y Venus por Rubens y Cristo en la moneda de Van Dyck.

Finalmente, toda una sala está dedicada a la pintura barroca española, con las representaciones graves y altíticas de Murillo (huida en Egipto) y de Ribera (Saint François).