Guía de viaje Simrishamn

En la Edad Media, Simrishamn fue un importante centro de comercio y pesca de arenque. Desde entonces, la ciudad ha conservado sus calles centrales pavimentadas y bordeadas de casas, que datan de la época en que Skåne pertenecía a Dinamarca. En 1749, Carl von Linné visitó Simrishamn, y la granja donde se alojaba en Kockska Gården se ha conservado desde entonces. La audacia del color del yeso se manifiesta en una amplia variedad de tonos, desde el blanco inmaculado al púrpura, el azul iroqués, el verde pastel, el rosa pálido y el amarillo soleado. La calle comercial Storgatan, en parte peatonal, desciende suavemente hacia el puerto. Se puede admirar la iglesia de Saint-Nicolai, cuyas partes más antiguas datan del siglo XII. Las esculturas frente a la iglesia son obra de Carl Milles.