Guía de viaje Surabaya

Capital de la provincia de Java Oriental, en Surabaya (3,5 millones de habitantes) predominan los javaneses (60%), el resto son madureses (30%) y chinos (10%). Surabaya es la segunda metrópolis de Indonesia después de Yakarta, y el mayor puerto y principal base naval del país. Sin embargo, la ciudad sufre contrastes sociales que no ha sabido contener. La extrema pobreza de algunos barrios contrasta con el lujoso y moderno desarrollo del centro de la ciudad, repleto de vistosas galerías comerciales y hoteles para hombres y mujeres de negocios (como el Plaza Tunjungan). La ciudad debe su nombre a una leyenda sobre una lucha a muerte entre un tiburón (saura) y un cocodrilo (buaya). A pesar de su pegadizo nombre, Surabaya no es realmente un lugar de vacaciones: es una segunda Yakarta, con contaminación, calor, ruido y tráfico intenso.Y sin embargo... la ciudad revela un aura indonesia llena de encantos por descubrir. En el casco antiguo (el bonito barrio árabe) y en los alrededores de los muelles aún se conservan algunas visiones de postal. Surabaya es un puerto importante donde esperan barcos con destino a toda Indonesia oriental: Kalimantan, Sulawesi, las Molucas, Nueva Guinea y las islas Menores de la Sonda. Este cosmopolitismo urbano tiene mucho que ofrecer. Entre los lugares que hay que visitar figuran el barrio árabe (también conocido como Ampel), con su soberbia mezquita, el inmenso mercado de Pasar Parbean y el barrio chino, que alberga templos antiguos como Hong Tik Hian y Hok An Kiong, que datan del siglo XVIII.El puerto se convirtió en el principal de la isla tras la caída del Imperio Majapahit. Los holandeses eligieron esta ciudad idealmente situada como centro de su comercio hasta la invasión japonesa. Cuando el país fue liberado en 1945, Surabaya se ganó el título de "ciudad de los héroes" por resistir a los invasores holandeses. Veinte años después, Surabaya fue escenario de otra carnicería: enzarzados en una guerra santa, los musulmanes masacraron a miles de comunistas. Se dice que las aguas de los canales corrieron rojas de sangre durante varios días.