Guía de viaje Copenhague

"Las lágrimas de los dioses". Este es el poético apodo de esta resina fosilizada procedente de bosques de coníferas engullidos por el mar. Su color miel translúcido ha enriquecido a la ciudad. Se encuentra en abundancia en las playas danesas, donde la caza del "oro del Báltico" es una tradición familiar de invierno.

En Copenhague, los alimentos ecológicos no son sólo una moda, sino una parte firmemente establecida de la forma de consumir de los daneses, que son los mayores consumidores del mundo. Es un país modelo en el que el gobierno está haciendo todo lo posible para conseguir una producción agrícola 100% ecológica, un objetivo que debe alcanzarse antes de la década de 2030

Desde 1847, es la referencia de la cerveza danesa. Se ha convertido en la marca oficial de la Casa Real y los lugareños la apodan Hof. Rubia y estable, debe su fama a un descubrimiento revolucionario no patentado, el del cultivo puro de levadura. Se dice que en Dinamarca se consumen unos 400 millones de litros al año

Un rectángulo rojo con una cruz blanca. La verá ondear sobre los tejados de las casas y en las entradas de los edificios institucionales. Los daneses están orgullosos de su bandera, que les acompaña en los momentos culminantes de su vida. Se iza a media asta para anunciar un fallecimiento, o a toda bandera para celebrar un cumpleaños o la superación de un examen.

¡Orgánico significa verde! Desde 2014, la ciudad ostenta el título de Capital Verde Europea Hay que decir que el país es un precursor en la protección del medio ambiente. Ya en 1973 se aprobaron leyes eficaces sobre el transporte, el tratamiento de residuos y la producción de electricidad. Los aerogeneradores son parte integrante del paisaje.

Este concepto ha vuelto con fuerza y está causando furor entre los habitantes de Copenhague. Literalmente significa "comer juntos". Pero la idea no es nueva. Es una tradición de los pueblos pequeños, donde la gente se reúne para comer, beber y jugar al bingo. Es el "mesón español" danés

Esta palabra de origen noruego significa "bienestar". Nació de la necesidad de soportar el frío del largo y oscuro clima invernal. El calor, el confort y la convivencia se hicieron imprescindibles. Los daneses la utilizan sin cesar. Hyggekrog es el rincón acogedor donde pasar un momento hygge; hyggebukser son los pantalones pilou-pilou que se llevan en casa.

el 75% de la población está inscrita en la Iglesia Evangélica Luterana, aunque pocos se consideran religiosos. Sin embargo, las iglesias siguen siendo populares. Un lugar de encuentro de la comunidad para celebrar un evento familiar por el que los daneses pagan un impuesto parroquial, que es opcional pero necesario para mantener los edificios.

Extrañas caravanas remolcadas aparcan en cruces o plazas. Las multitudes se reúnen mientras el aroma de las salchichas a la parrilla sale de la chimenea. Estos "carromatos de salchichas" son una institución desde 1921, y ofrecen perritos calientes al estilo danés, desde los más clásicos con cebolla frita hasta los más exóticos con piña

Strøget significa "la línea", recordando su equivalente inglés straight. Pionera de las calles peatonales desde 1962, su nombre se ha convertido en el término genérico de las arterias dedicadas al comercio y a los curiosos. Con una longitud aproximada de 1 km, atraviesa el casco antiguo de Copenhague. Imprescindible para los adictos a las compras.

Los daneses están muy apegados a sus antepasados vikingos. Estos valientes marineros, intrépidos pero quizá no irreprochables, cruzaron los océanos en sus barcos hasta Terranova Agricultores de corazón, herreros de corazón, su civilización no era tan bárbara como dicen los malos rumores.

¿Lo sabías? Zeeland o Seeland en danés significa "tierra del mar". Así se llama la isla donde se fundó Copenhague, la mayor de Dinamarca con 7.000 ^km2. Según la leyenda, la diosa Gefion arrebató este trocito de tierra a Suecia ¿Será ésta la razón de las rivalidades históricas en torno al estrecho de Øresund?