Guía de viaje São Paulo

São Paulo es una de las ciudades más caras de Brasil tanto en alojamiento como en comida. Para disfrutar de buenos restaurantes, cafés de moda y compras, hay que pagar precios similares a los de Francia. Quienes tengan un presupuesto ajustado tendrán que pasar más tiempo en merenderos, quioscos y mercados, y alojarse en albergues y hostales. Tenga en cuenta que es más barato alojarse en São Paulo los fines de semana, ya que los hoteles suelen estar más reservados por los trabajadores durante la semana.

No necesitas visado para viajar a la tropical São Paulo y a Brasil: puedes quedarte tres meses sólo con tu pasaporte. Transcurrido este plazo, puedes obtener una prórroga acudiendo con tu pasaporte a la jefatura de la policía federal de la ciudad donde te alojes. Tendrás que rellenar unos formularios y pagar una pequeña tasa. Ten paciencia, las colas pueden ser largas Otra opción es tramitar una salida temporal de Brasil. Cuando vuelvas, tendrás de nuevo tres meses de residencia autorizada en São Paulo. Cuidado, este pequeño truco funciona bien cuando tu estancia total no supera los seis meses en un año, pero más allá de eso, los funcionarios de inmigración pueden denegarte la entrada o negarse a concederte una nueva autorización por seis meses.

No es necesario vacunarse para viajar a São Paulo. Al ser una ciudad moderna, los principales problemas de salud que puede encontrar en la ciudad son los relacionados con la alimentación: cambiar de dieta ya es perturbador, pero si a eso se añade la comida picante, a veces preparada en condiciones antihigiénicas, suele provocar una diarrea grave, también conocida como turista. El agua no es potable en São Paulo, pero el calor es muy fuerte, así que lleve agua mineral embotellada.

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