FORTALEZA DE MEHRANGARH
Una vasta fortaleza, la mejor de la región, rodeada de murallas y con obras de arte de gran valor bien expuestas
Según Rudyard Kipling, el fuerte es un ejemplo de "la obra de un ángel y un gigante". Rodeada de murallas, la inmensa fortaleza aplasta la ciudad. Es, sin duda, el mejor fuerte de Rajastán, con obras de arte de gran valor expuestas. Encaramado en lo alto de su supuestamente inexpugnable promontorio, el fuerte de Jodhpur evoca toda la gloria de la historia de los Rajput... y las luchas entre los gobernantes hindúes. Fue el escenario de uno de los últimos conflictos en la región antes de la llegada de los británicos. En 1808, las tropas del maharajá de Jaipur la atacaron con cañones en un intento de resolver una disputa por una princesa de Mewar codiciada por los príncipes de las familias Kachhwaha y Rathore. La guarnición de la fortaleza logró repeler el asalto. Los muros exteriores han conservado el impacto de las balas de cañón disparadas por el ejército enemigo.
Pasarás por siete puertas sucesivas. Bajo el pórtico de la última, Loha Pol, "puerta de hierro", verá las huellas de las manos grabadas en una placa. Conmemoran el sati de las princesas Rathore. Los británicos prohibieron este rito bárbaro en 1829... Pero la tradición perduró y el último caso registrado de sati en Jodhpur fue en 1952, cuando la viuda de un alto funcionario de palacio se arrojó a las llamas.
Continúe la subida hasta la entrada del Museo Mehrangarh. Contiene quizás las colecciones más espectaculares de la región. Se exponen en suntuosos salones, construidos durante el reinado de los distintos maharajás. La primera muestra howdahs muy ricamente decorados, algunos de ellos de plata maciza. El Palki Khana está dedicado a los palanquines.
Acontinuación, llegará a un patio dominado por la fachada del Daulat Khana con sus numerosos balcones y quioscos. En el interior se exponen colecciones de armas y miniaturas. En los pisos superiores, observará la decoración del Phul Mahal (Palacio de las Flores) y las Takhat Vilas, los pisos del maharajá Takhat Singh en el siglo XIX, ricos en dorados, murales y vidrieras. A continuación, descenderá a la planta baja para visitar el Jankhi Mahal, "el palacio de los atisbos", desde el que las princesas podían asomarse a través de un fino jiali.
Al salir del palacio, diríjase a la cima del fuerte. Las murallas, todavía custodiadas por enormes cañones, ofrecen una espléndida vista de la azulada Jodhpur y, en la distancia, del enorme Palacio Umaid Bhawan. La pasarela conduce a un pequeño templo dedicado a Chamunda, una encarnación de Durga.
À visiter de préférence avec un guide pour avoir des explications