AVION ME LAISSE
Los mototaxis conocen muy bien el barrio de Domayo, un conjunto de tabernas y bares. Aquí, en la calle, se comen deliciosos pescados a la brasa tirados de precio, acompañados de plátanos fritos o arroz. Por todas partes, los altavoces de los bares escupen música y los gritos de los aficionados al fútbol inundan la calle con un ambiente eléctrico. Esta es la calle de la alegría en versión norte de Camerún. Las conversaciones se aceleran y rebotan de una terraza a otra. Un pequeño compendio de África donde la gente sonríe y le da la bienvenida de una manera muy sencilla y agradable.
«Avion me laisse» (el avión me abandona) es la historia de un noctámbulo que vino al animado barrio de Domayo la misma noche en la que se suponía que tenía que coger un avión. Arrastrado por el ambiente y la bebida, se olvidó completamente de su vuelo... hasta que el avión que se suponía que tenía que coger sobrevoló la ciudad de Marua; fue entonces cuando al levantar la cabeza dijo: «Avion me laisse!». Y todos se echaron a reír...