Restaurante que ofrece una cocina generosa con productos locales.
Creado en 1836, este ancestral establecimiento es un monumento a la gastronomía de Thiers. En l'Aigle d'or, amamos la historia, de ahí el nombre elegido en homenaje a Napoleón. Los platos también tienen un toque histórico ya que se refieren a Balzac y George Sand, clientes famosos. Este restaurante en el centro de la ciudad da prioridad a los productos locales con una cocina generosa que refleja el salteado de cordero con setas de ostra y acentos de Auvernia, como las patas de cerdo deshuesadas gratinadas con queso de Saint-Nectaire o el helado de verbena de Velay. La terraza tiene capacidad para 10 personas y la sala principal para 60 personas en un ambiente refinado y cálido.
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