MONASTERIO DE KATHOLIKO

Este monasterio, a 20 kilómetros de Hania, abandonado por los monjes en el siglo XVII en favor del monasterio de Gouverneto, se encuentra en las paredes del desfiladero de Avlaki. Se puede llegar a pie a través de un impresionante camino, pavimentado y asfaltado por los propios monjes: une el Monasterio de Gouverneto con Katholiko y termina de forma sensacional en la orilla del mar y en el pequeño puerto, que en su día fue utilizado por el monasterio.

El monasterio, fundado en el siglo XI por San Juan el Ermitaño, también conocido como el Forastero, es citado como el más antiguo de Creta. En el siglo XVII, bajo la dirección de Jeremías Tsagkaroglou y gracias a los dibujos prestados por el arquitecto Sebastiano Serlio, el complejo se transformó y es bajo este aspecto que visitamos hoy en día.

Los ermitaños solían llevar su vida ascética en las celdas del patio y sus alrededores. Antes de llegar al monasterio hay una cueva decorada con estalactitas que, según la leyenda, fue ocupada por San Juan el Ermitaño antes de su muerte.

Frente a la entrada, se dice que un depósito de agua natural tiene virtudes excepcionales y probablemente se usaba para bautismos. Es posible entrar en la cueva, pero en algunos lugares el paso es difícil. Según las excavaciones realizadas, el lugar debe haber sido utilizado como lugar de culto durante el período minoico. Trae una lámpara eléctrica si quieres ver cómo es todo. Cada año, el 7 de octubre, día de su fiesta, cientos de peregrinos vienen aquí para una ceremonia precedida por una procesión.