Guía de viaje Kalocsa

Apodada la ciudad del pimentón, Kalocsa, un pequeño pueblo de 16.000 habitantes en el centro de Puszta, es el principal centro para la preparación y el comercio del pimentón. A medida que estos grandes pimientos maduran, las mujeres de la región los recogen para hacer largos rosarios rojos que cuelgan en las fachadas de las casas. Una vez secas, se reducen a polvo. El pimentón, símbolo de la cocina húngara, sólo se conoce en Hungría desde el siglo XVI, época de la dominación turca. También se cultivaba en secreto durante mucho tiempo, ya que la producción de pimentón estaba estrictamente prohibida fuera de las fronteras del Imperio Otomano. El pimentón también se utilizaba como medicamento, especialmente contra la malaria y el cólera. Kalocsa también es famosa por sus bordados, que las mujeres locales han elevado a la categoría de arte. Estos bordados toman la forma de magníficos ramos de flores multicolores en los corpiños y delantales de mujeres y niñas, que se pueden encontrar en finos manteles de encaje. Estos mismos motivos florales también se utilizan como decoración en las fachadas de las casas. Kalocsa presenta el rostro de una ciudad ligeramente dormida. Sus magníficos bordados, relegados a la categoría de objetos turísticos y museísticos, ya no interesan a la generación actual.