Guía de viaje Sérifos Chora - Χωρα

La chora de Serifos está considerada, con razón, una de las más bellas de las Cícladas, si no de las islas griegas. Encaramada en un promontorio rocoso con vistas a la bahía de Livadi, parece caer por la pared rocosa en un equilibrio inestable. Aunque se puede subir a pie desde el puerto, guarde el paseo panorámico para el descenso al final del día. Una vez en la pequeña capital de Serifos, la ciudad se convierte en un laberinto de callejuelas que ofrecen magníficas vistas de la bahía. En la parte alta de la ciudad, aún se distinguen los restos de la fortaleza veneciana, a veces incrustados en las casas. Luego hay que subir (sí, otra vez...) hasta el kastro para disfrutar de una vista inmejorable de los alrededores. En la parte alta de Chora se encuentra también la iglesia de Aghios Athanasios, del siglo XVIII, y el ayuntamiento neoclásico, en la céntrica plaza de Pano Piatsa, ideal para tomar un café. Es una visita obligada y el corazón de la vida social de Serifos. En Pano Piatsa se encuentran la mayoría de las ouzeries y tabernas donde se reúnen los habitantes de la isla por las tardes. Pero la Chora de Serifos no sólo impresiona por su patrimonio y arquitectura. Lo que la distingue de tantos otros bellos pero abandonados cascos antiguos es que sigue en gran parte habitada y viva, a la vez que ha conservado su autenticidad. El alojamiento es difícil de encontrar, pero no necesariamente necesario cuando la mayoría de los hoteles están a sólo 5 km del puerto.