" Atenas, o la amas o la odias", le dirán muchos griegos. Sin embargo, esta ciudad no puede dejarle indiferente. A primera vista, sus numerosos edificios de hormigón, el ruido y el calor le abrumarán, pero sus encantos le seducirán poco a poco una vez que adopte el estilo de vida griego. Desplazarse es fácil y rápido, los paseos peatonales salpican la ciudad y los restos de la cuna de la humanidad son hipnotizantes. La magia de Atenas se ve reforzada por la calidez del pueblo griego, que estará encantado de recibirle. Es cierto que los medios de comunicación dan una imagen poco envidiable de la ciudad... Sí, Atenas está en plena metamorfosis y ha sufrido un shock económico, ¡pero ha sabido aprovecharlo! El arte callejero se extiende, las iniciativas ciudadanas abundan y los espectáculos callejeros son numerosos. Salga a descubrir esta ciudad fronteriza entre Oriente y Occidente que, para bien o para mal, ¡captará su atención!
¿Continúa su viaje por Grecia tras su visita a Atenas? Consulte nuestro artículo sobre lo que no debe perderse en Grecia
1. La Acrópolis
Una de las cunas de la humanidad. Sobre esta roca se alza el famoso Partenón. Visita obligada durante un viaje a Atenas, la Acrópolis posee una rica historia. Construcción, transformación y destrucción marcan la vida de este lugar. Ya sea el hombre o la naturaleza, la Acrópolis ha tenido que hacer frente a todo tipo de ataques, que han estropeado en gran medida su pasado esplendor. Si bien en sus primeros tiempos albergó el palacio del rey, es más conocida por ser las raíces del templo de Atenea. Construido en el siglo VIII a.C., el antiguo Partenón fue saqueado por los persas. No fue hasta muchos siglos después, bajo Pericles, cuando nació el actual Partenón.
¿Quiere aprovechar al máximo su estancia en Atenas y evitar las colas? Le aconsejamos que reserve una entrada todo en uno para 7 de los principales yacimientos arqueológicos de la ciudad, entre ellos la Acrópolis, el Ágora romana y el Ágora de Atenas.
2. El Museo de la Acrópolis
Inaugurado en 2009, el Museo de la Acrópolis fue diseñado por el arquitecto franco-suizo Bernard Tschumi. Hecho de cristal y hormigón, este moderno coloso ofrece una increíble vista de la Acrópolis. Construido sobre pilotes, se pueden contemplar directamente los restos arqueológicos de la ciudad y antigüedades de la Acrópolis y de todas sus épocas. En la parte superior del museo, la Sala del Partenón ofrece una magnífica reconstrucción del mítico edificio. Los frisos del Museo Británico, que Grecia sigue esperando, están copiados en yeso para ofrecerle la mejor inmersión posible. ¡Un excelente complemento a la visita de la Acrópolis! Para disfrutar del museo con entrada y audioguía haga clic aquí ¡y reserve su entrada en unos pocos clics !
3. El Ágora
El centro de todas las ciudades griegas. En ella se tomaban la mayoría de las decisiones políticas y se juzgaba a los prisioneros. Al igual que la Acrópolis, el Ágora fue reconstruida y reformada en numerosas ocasiones. Ya fueran los persas, los romanos o los hérulos, cada nación se complacía en destruir este lugar clave de Atenas. Durante su visita al lugar, se topará con ingeniosas reliquias, como un reloj de agua que data del siglo IV a.C. También es posible ver el antiguo edificio que se cree que fue la prisión de Sócrates. Se dice que los arqueólogos han descubierto pequeños frascos que contenían la cicuta que envenenó al famoso filósofo. En la actualidad, el mítico templo de Hefesto, más conocido como Theion y construido en el 450 a.C., aún domina todo el lugar. Haga clic aquí para para reservar su entrada y evitar las colas a la entrada del Ágora.
4. La Olimpiada: el Templo de Zeus
Este colosal templo es sin duda el monumento más interesante del emplazamiento de Olimpia. Estaba dedicado a Zeus, rey de los dioses olímpicos. Su construcción duró del 470 al 456 a.C. y se terminó con el botín de la guerra de Elis contra Pisa. Las columnas eran de piedra de concha, pero los azulejos y las gárgolas con cabeza de león eran de mármol de Paros. El Templo de Zeus, como muchos otros templos, sufrió un trágico destino: fue incendiado en 426, por orden de Teodosio II, y destruido en el siglo VI por los terremotos, al igual que los demás monumentos del santuario. Aún pueden verse las columnas y otros elementos arquitectónicos tirados en el suelo.
5. El Museo Arqueológico de Atenas
Terminado en 1888, le llevará al menos 3 horas visitar el impresionante Museo Arqueológico de Atenas. En él descubrirá multitud de colecciones que recorren la historia de la civilización griega desde el Neolítico hasta el final del Imperio Romano. Hay numerosas figurillas de arcilla, piedra o hueso que datan del 6.600 al 3.300 a.C. Los objetos ya no se presentan cronológicamente, sino por localidades. En la sala de Micenas, por ejemplo, se encuentra la famosa máscara de Agamenón, que en realidad no tiene ninguna relación con el héroe homérico. El museo también alberga una de las mayores colecciones de bronces antiguos, la mayoría de los cuales son antiguas ofrendas reservadas a los santuarios. Lo más destacado del museo es la escultura del Jinete de Artemisia , increíblemente realista gracias a los movimientos musculares realizados en la piedra.
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6. El Estadio Olímpico o Panatenaico
También conocido como "Estadio de Mármol", el Estadio Panatenaico data de hace más de 2.500 años. Durante siglos, albergó combates de gladiadores, concursos de poesía, carreras de cuadrigas y las míticas pruebas de pentatlón. Perfectamente conservado, el estadio fue completamente renovado sobre los restos del antiguo templo para albergar los primeros Juegos Olímpicos modernos: ¡los Juegos Olímpicos de Atenas de 1896!
7. El Jardín Nacional
Diseñado en 1839 por Amalia, la primera reina de Grecia, quiso hacer de este majestuoso entorno verde el patio del palacio real. Hoy en día, el Jardín Nacional contiene más de 500 especies de plantas procedentes de los cinco continentes. El jardín es una joya de estilo neoclásico, bien cuidado y rico en estatuas académicas. Entre toda esta rica vegetación se encuentra el Zappeion. Este edificio, construido con la herencia del acaudalado Evángelos Záppas, está dedicado al deporte y es posiblemente el primer edificio creado en el mundo al servicio de los Juegos Olímpicos de la era moderna. Hoy en día se puede alquilar para eventos privados, pero no se puede imaginar el precio..
8. Un paseo por Plaka
Se dice que el nombre de este barrio procede de los soldados albaneses que ocuparon este lugar en el pasado. Otra teoría es que el nombre procede de una placa encontrada cerca de la iglesia de San Jorge de Alejandría y del antiguo teatro de Dionisio. Con sus estrechas calles y sus hermosas villas neoclásicas de color crema, Plaka es una zona de visita obligada. Animada y peatonal, cuenta con multitud de terrazas y tiendas frecuentadas tanto por turistas como por lugareños. Al pasear, encontrará balcones de hierro forjado salpicados de mil flores en cada esquina. Colorido y antiguo, este barrio ha estado habitado desde la prehistoria y le ofrece la oportunidad de descubrir casas que datan de la ocupación turca, iglesias bizantinas y algunos museos. Si desea visitar Plaka en detalle haga clic aquí y reserve plaza para una visita guiada matinal a laAcrópolis y Plaka
9. Mercado Central de Atenas
Conocido como Varvakeios agora, este céntrico mercado cubierto merece una parada por su ambiente y la abundancia de productos frescos. Situado a pocos pasos de la plaza Omonia, aquí podrá degustar productos tradicionales griegos procedentes de todo el país Carne, pescado, verduras, queso, especias o fruta, ¡encontrará algo que le guste a un precio razonable! Abierta desde 1886, el ágora de Varvakeios ha conservado su ambiente de antaño gracias a su subasta. Aunque el mercado tiene un ambiente agradable, ¡no espere poder regatear! Los precios no bajan fácilmente.
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10. Ascenso al monte Lycabetta
Esta colina es un excelente punto de referencia en cualquier lugar de Atenas, pero también es uno de los puntos más altos de la ciudad. Con sus 277 m, la cima del monte Lycabetta ofrece una vista panorámica de Atenas y la Acrópolis. Para los antiguos atenienses, fue la diosa Atenea quien dejó esta roca en medio de la ciudad. En efecto, deseosa de estar más cerca del cielo, la diosa habría buscado una enorme roca en el monte Penteles para colocarla en la Acrópolis. Pero como los presagios eran desfavorables, la dejó por el camino... En el pasado, era Zeus quien recibía honores en la cima de Lycabetta. Ahora, Aghios Georgios, alias San Jorge, reina supremo. Famoso por haber matado al dragón, este mártir que murió hacia el año 303 sigue siendo uno de los santos cristianos más famosos.
11. El monte Pnyx
Situada en el centro de Atenas, la Pnyx está rodeada por las colinas de las Ninfas y las Musas. Antiguamente, la Ecclesia, asamblea política de ciudadanos, se reunía aquí para votar el presupuesto o la aplicación de una ley. Pero también se elegía a los miembros de la Boulê, la Héliée y los magistrados. Si se eligió el Pnyx como lugar de celebración, no fue por casualidad. En efecto, los atenienses buscaban un lugar más tranquilo que el Ágora y por ello eligieron la colina que la dominaba: el Pnyx. Este lugar ha evolucionado a lo largo del tiempo y presenta tres periodos distintos en cuanto a los materiales utilizados para su construcción. Si al principio la madera era el material principal, la piedra fue haciéndose un hueco poco a poco.
12. La colina de las Musas
Frente a la Acrópolis, la Colina de las Musas y su monumento de Filopappos (monumento funerario construido en honor del último príncipe del reino de Commagene) ofrecen una de las vistas más espectaculares de la ciudad de Atenas y sus alrededores. Desde lo alto de la colina (a unos 150 metros de altura) se divisa la ciudad, la Acrópolis, el Partenón, el puerto del Pireo y el mar Egeo. El paseo hasta la cima es muy agradable gracias al sendero sombreado. La vista desde la cima es totalmente diferente a la de la colina Lycabetta, ya que se puede contemplar la ciudad desde una posición mucho más elevada. Aproveche para fotografiar la Acrópolis, ¡es el mejor lugar para hacerlo! ¿Es usted aficionado a la fotografía? ¡Echa un vistazo a nuestro artículo sobre los 10 lugares más Instagrammables de Grecia!
13. El mercadillo de Monastiraki
No se puede visitar Atenas sin pasar por Monastiraki... o más bien zambullirse en él. Antaño un bazar turco, este rastro está ahora plagado de tiendas clásicas y modernas. Aléjese de la calle principal y seguirá encontrando multitud de pequeños puestos que venden viejos objetos decorativos o utilitarios, sillas, mesas, pero también ropa o libros antiguos. El rastro también se llama Gioussouroum, en referencia al nombre del primer anticuario que tuvo su tienda en la plaza.
14. Lago Vouliagmeni
En este diminuto lago, de aguas extremadamente profundas, los lugareños se bañan en verano y en invierno, ya que el agua está naturalmente caliente, entre 21°C y 27°C. Auténtico balneario al aire libre, el lago es conocido por sus virtudes terapéuticas: las personas mayores le dirán que el agua de este lago es buena para el cuerpo y los médicos afirman que tiene virtudes terapéuticas y alivia la artritis, la ciática, el lumbago, los problemas dermatológicos... También podrá disfrutar de sus pececillos, populares por sus sesiones de pedicura, así como de las tumbonas y sombrillas, cabañas y duchas situadas alrededor.
15. Tomar el sol en las playas de Atenas
¿Se pregunta dónde ir a la playa en Atenas? Situada a unos 20 km del centro de Atenas, la localidad costera de Varkiza cuenta con hermosas playas privadas de arena y buenos restaurantes en el golfo Sarónico. La playa privada más popular, la de Varkiza Resort Yabanaki, es de visita obligada. También puede hacer paradas en la carretera entre Varkiza y Lagonissi, donde le esperan pequeñas calas y ensenadas de aguas cristalinas
¿Cuándo ir a Atenas?
Con su clima mediterráneo, Atenas, velada de mármol antiguo, ocre y un cierto gris desconcertante, es atractiva en todas las estaciones. En Atenas, incluso en invierno, las temperaturas rara vez bajan de los 10 °C. Los atenienses le dirán que el microclima del Ática es el más suave del país. La omnipresente luminosidad viste la capital y alegra sus colores. En julio y agosto, el calor es tórrido (25/34°C). De marzo a junio es más suave (11/27°C), y de septiembre a mediados de noviembre (15/23°C). El inconveniente es que soplan algunos vientos y llueve arena del Sáhara.
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¿Cómo llegar del aeropuerto al centro de Atenas?
El aeropuerto internacional Venizelos está situado a 35 km del centro de la ciudad. Para llegar a él, tiene varias opciones, como el metro, que es el medio ideal para llegar al aeropuerto desde cualquier estación de la ciudad. También hay líneas azules y amarillas de autobuses exprés, que se recogen en la zona de llegadas. También puede optar por coger un taxi, ya que actualmente existe una tarifa plana para ir del aeropuerto al centro de la ciudad (40 euros durante el día y 55 euros por la noche). Consulte aquí todos los detalles prácticos de su llegada.
¿Cómo visitar Atenas?
El metro es la forma más cómoda de desplazarse por Atenas. Da servicio a las principales líneas de autobús y tranvía, así como a las de cercanías (proastiakos). Consta de tres líneas (1, 2 y 3), de las cuales la línea 1 es la que conecta Atenas con los suburbios del norte (Kifissia) y el puerto del Pireo. También puede optar por alquilar un coche aquí. Es uno de los medios de transporte más eficaces para descubrir el país. Sin embargo, le recomendamos que tenga mucho cuidado al conducir, ya que los griegos son muy ingeniosos a la hora de interpretar las normas de tráfico. Cuando un coche ha decidido adelantarle, no es raro que lo haga por el carril de la izquierda...
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Atenas es una ciudad turística con una gran oferta de alojamiento para todos los gustos y presupuestos. Sin embargo, le aconsejamos que reserve con antelación, especialmente durante las vacaciones escolares, para aprovechar las mejores ofertas y disponibilidad. Éstos son nuestros 3 mejores hoteles en Atenas
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- Las mejores vistas
Para disfrutar de las mejores vistas de la Acrópolis, con el Partenón y el Odeón de Herodes Ático, regístrese en el Divani Palace Acropolis Hotel. El hotel es muy tranquilo, a pesar de su céntrica ubicación, por lo que ofrece el descanso necesario. Recuerde reservar con antelación, ya que los precios suben en verano. Para consultar tarifas y disponibilidad, haga clic aquí
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