Guía de viaje Selçuk - Éfeso

Éfeso, situada a siete kilómetros tierra adentro del mar Egeo, fue una importante ciudad portuaria en la Antigüedad. Se dice que conoció su época dorada entre los siglos II y I a. C. Su puerto era uno de los más poderosos del Egeo. Actualmente recibe dos millones de visitantes al año. En la Antigüedad, aquí se rendía culto a Artemisa (diosa protectora de la ciudad de Éfeso), como prueban las ruinas de su magnífico templo. En torno a este culto se desarrolló una próspera ciudad. Además de ser la séptima maravilla del mundo antiguo, este templo también era conocido por albergar a exiliados políticos. Durante la era cristiana, se dice que la Virgen María eligió terminar aquí su vida, protegida por san Juan el Evangelista, a quien Jesús confió a su madre antes de morir, y se dice que san Pablo se dirigió aquí a los paganos. El famoso yacimiento de Éfeso es un lugar único y emocionante y se encuentra muy cerca. Es la ciudad antigua mejor conservada del Mediterráneo después de Pompeya. ¿Cómo no emocionarse ante el poderoso encanto de esta joya de la Antigüedad que sus habitantes creían eterna? Con sus calles empedradas, la biblioteca de Celso, el templo de Adriano y el teatro, uno puede reconstruir cómo era el día a día en la Antigüedad. Muy cerca encontrará la antigua aldea griega de Şirince, Tire y su mercado, y Birgi que están llenas de lugares de interés.